EL LUCRATIVO NEGOCIO DE ATACAR A LA IGLESIA

“Cuando los soldados pusieron en la cruz a Jesús, se repartieron su ropa en cuatro partes iguales, una para cada soldado. En cuanto a la túnica de Jesús, que era sin costura, de una sola pieza, decidieron: “no la rompamos, más bien echémosla a la suerte a ver de quién será”. Así se cumplió una profecía que dice: Se repartieron mi ropa y sortearon mi túnica. (Juan 19, 23-24)
Sin que se pretenda abordar nuevamente la ya “trasnochada” polémica sobre El Código Da Vinci o el Evangelio Apócrifo de Judas –pues ya se ha dicho todo lo que se tenía que decir- puede resultarnos muy provechoso, no sólo a nivel personal sino también comunitario, analizar muy de cerca las enseñanzas que –entre líneas- nos han dejado las controversias de los últimos dos meses.
APRENDIENDO DE LOS ATAQUES

Lo que se puede aprender de los ataques que ha sufrido la Iglesia podría ser mucho. Por un lado, todo lo sucedió sirvió para ver la sinceridad de quienes decían amar a la Iglesia o creerle; y por otro, los acontecimientos de los últimos dos meses, fueron una especie de “termómetro” que sirvió para determinar hasta que grado llega la ignorancia que, en cuanto fe, muchos presentan.
Sin embargo no será eso, al menos no directamente, lo que en esta oportunidad trataremos. Más allá del serio problema de la ignorancia de religiosa, o de un simple conflicto de lealtad, que, al fin y al cabo no es algo que atemorice a la Iglesia, abordaremos un tema mucho más sórdido y grave; analizáremos cómo el amor por el dinero, puede destruir la fe de la gente sencilla y manipular las conciencias. Siendo aun más concretos, abordaremos el fenómeno económico y de marketing que se esconde detrás de los principales ataques que ha recibido la Iglesia. Un asunto al que no le debemos restar importancia, porque, todos, directa o indirectamente hemos hecho parte de él.
LECCIÓN UNO

“Cómo hacerse rico difamando a los demás y no terminar encarcelado en el intento”, podría ser la primera lección que han ofrecido los escándalos recientes. Libros, películas, series de dibujos animados ridiculizando al Papa y a la Iglesia, documentales, entre muchos otros, son los nuevos “productos” de temporada en el mercado. Detrás de todos ellos se mueven enormes cantidades de dinero. Todo a costa de la ignorancia y la debilidad de millones de personas. Sin duda, parece que la consigna fuera: “ataquemos a quien no puede demandarnos, hagamos dinero a costa de quienes, por su posición, no pueden hacernos frente”. ¿Suena esto exagerado? Veamos las cifras.
EL CÓDIGO DAN BROWN

La novela El Código Da Vinci, de Dan Brown, fue publicada en abril del 2003, desde entonces ha vendido más de 60 millones de ejemplares, y se ha traducido a 44 idiomas. Hoy día es considerada como el “bestseller de la década”.
Por si fuera poco, la novela ha generado todo tipo de subproductos: juegos de video, páginas web, una película estrenada recientemente, por la que Brown recibió una cifra de 5 millones de dólares y una promesa de regalías sobre un porcentaje no especificado luego de su estreno; planes turísticos con recorrido guiados por los escenarios en los que se desenvuelve la trama de la película, libros, afiches, concursos con fanáticos de la novela, millonarias campañas publicitarias, entrevistas, entre muchos más. Según la revista "Forbes", en su edición especial sobre las 100 celebridades más millonarias del mundo del espectáculo del año 2005, Dan Brown ocupó el puesto 12. Ese mismo año sus ingresos llegaron a 76,5 millones de dólares. Actualmente, su fortuna haciende a los 230 millones de dólares, y seguirá en aumento, pues la película a pesar de las críticas- ocupa los primeros lugares de taquilla en Europa y Estados Unidos. La revista Newsweek estima que 800 millones de personas acudirán a ver la película. Adicionalmente, el éxito de esta novela ha tenido para Dan Brown un efecto retroactivo. La gente ha empezado a comprar sus tres novelas anteriores; de estas aun no se han presentado reportes oficiales sobre los ejemplares vendidos hasta la fecha. Pero el éxito no sólo se proyectó hacia el pasado, su quinta novela, que aun no ha salido al mercado y que tiene como protagonista al mismo Robert Landong de “El Código Da Vinci”, ya ha sido vendida a una reconocida editorial estadounidense. También ésta promete ser un éxito en ventas.

EL EVANGELIO SECRETO DE LA NATIONAL GEOGRAPHIC

Lamentablemente el caso de Brown sobre enriquecimiento a costa de las creencias de los demás, no es el único. Todavía analizaremos dos casos más. Cómo ya lo hemos mencionado se trata de una tendencia del mercado y aunque nos resulte incomodo o desagradable, atacar a la Iglesia vende, y ya son muchos los que se han enterado de eso; así que no será la primera ni la última de las provocaciones a la Iglesia.
El turno ahora es para la National Geographic. La afamada cadena de televisión que el pasado Domingo de Ramos hizo público el texto de un evangelio apócrifo, copia de un original del siglo II, llamado el Evangelio de Judas.
La presentación de este descubrimiento tuvo todos los elementos necesarios para crear controversia: un polémico documental, una exagerada campaña de expectativa, y una fecha de presentación bastante singular, el Domingo de Ramos.
Todas estas estrategias han dejado muy claro que las motivaciones de la National Geographic, al presentar este descubrimiento de la manera en que lo hizo, van mucho más allá del interés científico. Bastaría con que viéramos la hoja de vida de los expertos que participaron en la producción y realización del polémico documental -ni un solo católico- para convencernos de ello.
“El Evangelio de Judas”, tal como ya lo han registrado muchos medios de comunicación, se ha convertido en uno de los grandes éxitos comerciales de National Geographic. Éxito en Raiting(porcentaje de televidentes que ven un programa), éxito en ventas, por un lado, del texto del Evangelio de Judas y por otro de la revista que cada mes pública la National Geographic. Por “extraño” que parezca, la famosa cadena, basó toda la publicidad, y general todo el concepto creativo del documental, en una sólo idea: “La Iglesia Católica, ha mentido y engañado a la gente desde el principio”. En el documental se ridiculiza a las figuras insignes del Cristianismo como San Irineo y los mismos apóstoles.
Todo el dinero recaudado tendrá tres destinos finales: la National Geographic, la Maecenas Foundation, entidad que supervisó de la restauración del manuscrito; y por último Tchacos Nussberger, la mujer que vendió los derechos sobre su contenido. En resumen, un negocio redondo. El pequeño problema es que el lucro se obtuvo pasando por encima de la fe de la gente.

EL CINISMO DEL AÑO, EL CASO MTV

Para los que no lo sepan, Mtv es la cadena de televisión y música más grande del mundo. En los últimos años esta cadena ha incursionado en la producción de caricaturas de contenido adulto. Su última creación sigue los mismos lineamientos que sus series anteriores; el problema es que en esta ocasión su “creatividad” se inspiró en la famosa tendencia de mercado: atacar, ridiculizar a la Iglesia.
Popetown (Ciudad del Papa) es el nombre de la controvertida serie de dibujos animados. La agencia EFE, hace una exacta decripción de su contenido: “La serie muestra a un Papa excéntrico y senil de 77 años que se pierde jugando al escondite en el Vaticano, mientras el padre Nicholas, responsable de organización interna de la Santa Sede, contrata a un judío neoyorquino para hacer de doble del Santo Padre. En otro de los capítulos se presenta a un cardenal “corrupto, que vende a los huérfanos como esclavos”.
La serie se estrenó en Alemania hace más de tres semanas en medio de una fuerte polémica por su contenido agresivo y anticatólico. Pero, ni las acciones legales que la Iglesia alemana interpuso contra la Mtv ni las protestas de los católicos pudieron impedir que fuera emitida. Con un controvertido fallo de un juez en Alemania, se dio vía libre a Mtv para la primera emisión del programa el pasado 3 de mayo. Según los directivos de Mtv, Popetown “es una forma de arte, una forma de entretenimiento satírico, que en nada representa un insulto a las orientaciones religiosas de los espectadores”, opinión que a su vez fue respaldada por los Partidos Socialdemócrata alemán, Liberal y Los Verdes.
Popetown, fue producida por la BBC y se emitirá en Alemania, Australia, Italia y Nueva Zelanda. aunque, hasta ahora, sólo se ha emitido en Nueva Zelanda y Alemania.

Hay quienes afirman que ante situaciones como estas, en las que se pretende atacar las convicciones religiosas de la gente, no se debe responder a los ataques, puesto que se aumentaría la polémica y en ultimas se generaría un efecto contrario. Sin embargo en ocasiones, los ataques pueden generar tal confusión, que se hace casí obligatorio brindar ayuda a quienes se sienten asaltados por las dudas y la confusión. Por tal razón ofrecemos tres textos muy puntuales que por su precisión pueden ayudarnos a discernir mejor los lamentables acontecimientos de los últimos meses.
“En toda época histórica ha habido una producción de panfletos anticristianos. Hoy día la novedad consiste en que un cuidadoso estudio del mercado detecta la posibilidad de grandes ganancias, cuando se golpean convicciones profundas de muchos, pues la polémica y la confrontación de criterios acelera los tirajes, los ratings y el éxito de taquilla de las películas. Se trata de un nefasto método que altera la naturaleza y los fines de una comunicación social válida y digna, que nunca puede basarse en sembrar inquietudes y suscitar escándalos mediante el procedimiento de propalar deliberadas mentiras y de silenciar claras verdades. Se tiene una nueva prueba de que la codicia, en esta sociedad que va perdiendo los valores, prima sobre el respeto a las personas, a sus convicciones profundas y a su derecho a una información objetiva. Por último, la industria de la información y del entretenimiento manipula cínicamente a quienes debería servir”. (Texto del Documento de la conferencia episcopal de Ecuador)
"ofender y pisotear el sentimiento religioso de alguien para ganar una fortuna es simplemente una vileza...”(portavoz de la Conferencia Episcopal Checa, Martin Horálek)
“Se habla mucho de la traición de Judas, y no se percibe que se está repitiendo. Cristo sigue siendo vendido, ya no a los jefes del Sanedrín por treinta denarios, sino a editores y libreros por miles de millones de denarios. Parece que la edición de varios millones y la puesta en pantalla, además de desacreditar a la Iglesia católica, traerá grandes ganancias al autor y a los editores. Después de la aparición de este libro, creció la venta y la edición de libros pseudo-científicos sobre la Iglesia, los gnósticos, la literatura feminista y sobre las diosas paganas” (Padre Cantalamessa, Predicador del Papa).