Gran trabajo evangelizador han realizado las distintas comunidades religiosas que en el territorio de nuestra Arquidiócesis se encuentran desde mucho tiempo antes de haber sido creada la Diócesis.
Por JULIO GIRALDO
Varias de las parroquias que hoy existen fueron, iniciadas unas y construidas otras, precisamente, por comunidades religiosas. Es el caso de la unidad pastoral San Rafael Arcángel que comienza en el barrio Montes, concretamente en la calle 30 con la carera 25, en una pequeña casa de mampostería de propiedad de doña Angelina de Montes, quien con mucho amor la donó para que los padres Salesianos de la Iglesia de San Roque iniciaran allí un centro de culto y evangelización. Es el año 1955, y ya el padre Wienslao Dubinkas y sus compañeros de comunidad celebran la misa dominical y administran sacramentos en la pequeña casa convertida en capilla. Los habitantes del barrio Montes, en su mayoría obreros y dueños de pequeños negocios que viven en humildes viviendas, apoyan el trabajo de los salesianos y en 1961, en la celebración de la gran misión diocesana, la que apenas era una pequeña capilla sirvió como centro de evangelización en donde los misioneros celebraban las eucaristías, y las conferencias las dictaban en las afueras del colegio de las Hermanas “María de Nazareth”.
Luego de la gran misión, la comunidad quedó muy motivada y se comenzó en firme el proyecto de parroquia. Un grupo de feligreses quería que la iglesia se construyera en el sitio donde los misioneros dictaron sus conferencias -calle 35 con carrera 26-, y exponían argumentos que hoy tienen mucha validez: era un terreno más amplio y sin tanto ruido. El mismo padre Stanley Matutis estaba de acuerdo con esta iniciativa, pero otro grupo de feligreses se opuso y determinó que el templo se debía construir en el mismo sitio de la capillita, es decir, en la calle 30 con carrera 25, donde está en la actualidad (cuanta razón tenían aquellas personas de la primera iniciativa,) ya que hoy uno de los problemas principales que tiene el templo de San Rafael Arcángel es el ruido y la polución por la gran cantidad de vehículos que transitan por la calle 30 de día y de noche.
Superadas las discusiones, el trabajo pastoral siguió bajo el liderazgo de los padres salesianos y muy pronto este lugar de culto es declarado vicaría parroquial, y en el año 1967 Monseñor Germán Villa Gaviria. mediante decreto 465, crea la parroquia dedicada a San Rafael Arcángel. Se nombra como primer párroco a Juan de Jesús Serna, sacerdote que se distinguió por su gran carisma en la construcción de escuelas y colegios y, en efecto, lo primero que hace es construir y fundar una escuela que hoy es el colegio de las hermanas “María de Nazareth”; además, impulsó la ampliación del templo y compró la casa que hoy sirve de casa cural. Como segundo párroco es nombrado el Padre Miguel Hostos, quien estuvo más de 20 años al frente de la parroquia; le siguieron los presbíteros Jairo Restrepo y Mario Solano.
LA PARROQUIA HOY
Al frente de esta comunidad se encuentra hoy el padre Ovidio Mendoza, quien al llegar hace ya un año y medio a su nueva parroquia encontró una comunidad muy motivada y llena de Dios, así como unos grupos de apostolado que trabajan desinteresadamente y con una preparación doctrinal ajustada a las nuevas exigencias de la Iglesia para sus agentes de pastoral; unos sectores muy bien demarcados donde se realizan las asambleas familiares, y toda una feligresía que colabora y se encuentra dispuesta a apoyar las iniciativas de su párroco.
Le corresponde al padre Ovidio atender también las unidades pastorales de San Miguel y San Gabriel, situadas en el barrio el Rebolo, ya que estas dos nacen de la parroquia de San Rafael. Es una población aproximada de ocho mil habitantes entre los cuales existen algunos muy pobres económicamente.
El despacho parroquial es atendido todos los días y el padre Ovidio, muy a pesar de que en las mañanas trabaja como capellán de la cárcel modelo, todas las tardes de la semana se encuentra presente en su despacho y atiende a la feligresía; igualmente los sábados y domingos le corresponde hacer un esfuerzo extraordinario para poder atender su parroquia con misas, bautizos y matrimonios, y celebrar en San Gabriel, San Miguel y en el conjunto residencia Los Cocos, otra célula pastoral de San Rafael Arcángel.
Mención especial merece la fiesta patronal a la cual llegan gentes de todas partes del país, atraídos por las gracias especiales que Dios concede con la intercesión de San Rafael, pues no podemos olvidar que Rafael significa “medicina de Dios” y son muchos lo devotos que imploran al santo para obtener curación de sus males corporales y espirituales.
Como proyectos en mente del padre Ovidio están la ampliación del templo actual, terminar la parroquia de San Gabriel que ya tiene un templo organizado con todo lo que se requiere para las celebraciones, y tratar de conseguir los medios que hagan posible el terreno para construir el templo de San Miguel que aún no tiene nada propio; pero, por sobre todo lo anterior, que la feligresía que hace parte de estas unidades pastorales siga creciendo en su fe y en el amor a Jesucristo.
Por JULIO GIRALDO
Varias de las parroquias que hoy existen fueron, iniciadas unas y construidas otras, precisamente, por comunidades religiosas. Es el caso de la unidad pastoral San Rafael Arcángel que comienza en el barrio Montes, concretamente en la calle 30 con la carera 25, en una pequeña casa de mampostería de propiedad de doña Angelina de Montes, quien con mucho amor la donó para que los padres Salesianos de la Iglesia de San Roque iniciaran allí un centro de culto y evangelización. Es el año 1955, y ya el padre Wienslao Dubinkas y sus compañeros de comunidad celebran la misa dominical y administran sacramentos en la pequeña casa convertida en capilla. Los habitantes del barrio Montes, en su mayoría obreros y dueños de pequeños negocios que viven en humildes viviendas, apoyan el trabajo de los salesianos y en 1961, en la celebración de la gran misión diocesana, la que apenas era una pequeña capilla sirvió como centro de evangelización en donde los misioneros celebraban las eucaristías, y las conferencias las dictaban en las afueras del colegio de las Hermanas “María de Nazareth”.
Luego de la gran misión, la comunidad quedó muy motivada y se comenzó en firme el proyecto de parroquia. Un grupo de feligreses quería que la iglesia se construyera en el sitio donde los misioneros dictaron sus conferencias -calle 35 con carrera 26-, y exponían argumentos que hoy tienen mucha validez: era un terreno más amplio y sin tanto ruido. El mismo padre Stanley Matutis estaba de acuerdo con esta iniciativa, pero otro grupo de feligreses se opuso y determinó que el templo se debía construir en el mismo sitio de la capillita, es decir, en la calle 30 con carrera 25, donde está en la actualidad (cuanta razón tenían aquellas personas de la primera iniciativa,) ya que hoy uno de los problemas principales que tiene el templo de San Rafael Arcángel es el ruido y la polución por la gran cantidad de vehículos que transitan por la calle 30 de día y de noche.
Superadas las discusiones, el trabajo pastoral siguió bajo el liderazgo de los padres salesianos y muy pronto este lugar de culto es declarado vicaría parroquial, y en el año 1967 Monseñor Germán Villa Gaviria. mediante decreto 465, crea la parroquia dedicada a San Rafael Arcángel. Se nombra como primer párroco a Juan de Jesús Serna, sacerdote que se distinguió por su gran carisma en la construcción de escuelas y colegios y, en efecto, lo primero que hace es construir y fundar una escuela que hoy es el colegio de las hermanas “María de Nazareth”; además, impulsó la ampliación del templo y compró la casa que hoy sirve de casa cural. Como segundo párroco es nombrado el Padre Miguel Hostos, quien estuvo más de 20 años al frente de la parroquia; le siguieron los presbíteros Jairo Restrepo y Mario Solano.
LA PARROQUIA HOY
Al frente de esta comunidad se encuentra hoy el padre Ovidio Mendoza, quien al llegar hace ya un año y medio a su nueva parroquia encontró una comunidad muy motivada y llena de Dios, así como unos grupos de apostolado que trabajan desinteresadamente y con una preparación doctrinal ajustada a las nuevas exigencias de la Iglesia para sus agentes de pastoral; unos sectores muy bien demarcados donde se realizan las asambleas familiares, y toda una feligresía que colabora y se encuentra dispuesta a apoyar las iniciativas de su párroco.
Le corresponde al padre Ovidio atender también las unidades pastorales de San Miguel y San Gabriel, situadas en el barrio el Rebolo, ya que estas dos nacen de la parroquia de San Rafael. Es una población aproximada de ocho mil habitantes entre los cuales existen algunos muy pobres económicamente.
El despacho parroquial es atendido todos los días y el padre Ovidio, muy a pesar de que en las mañanas trabaja como capellán de la cárcel modelo, todas las tardes de la semana se encuentra presente en su despacho y atiende a la feligresía; igualmente los sábados y domingos le corresponde hacer un esfuerzo extraordinario para poder atender su parroquia con misas, bautizos y matrimonios, y celebrar en San Gabriel, San Miguel y en el conjunto residencia Los Cocos, otra célula pastoral de San Rafael Arcángel.
Mención especial merece la fiesta patronal a la cual llegan gentes de todas partes del país, atraídos por las gracias especiales que Dios concede con la intercesión de San Rafael, pues no podemos olvidar que Rafael significa “medicina de Dios” y son muchos lo devotos que imploran al santo para obtener curación de sus males corporales y espirituales.
Como proyectos en mente del padre Ovidio están la ampliación del templo actual, terminar la parroquia de San Gabriel que ya tiene un templo organizado con todo lo que se requiere para las celebraciones, y tratar de conseguir los medios que hagan posible el terreno para construir el templo de San Miguel que aún no tiene nada propio; pero, por sobre todo lo anterior, que la feligresía que hace parte de estas unidades pastorales siga creciendo en su fe y en el amor a Jesucristo.
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