Por Emilio Andrés Navarro*
Todos alguna vez hemos cometido un ‘pecado’ contra el medio ambiente; por pequeño que este sea: tirar un papel a la calle, dejar la llave del agua abierta innecesariamente, dejar el cargador del celular conectado, quedarse dormido con el tv encendido y muchos más. Y el que diga que no, que “tire la primera piedra”.
Incluso en la Jornada Mundial de la paz del presente año, el Papa Benedicto XVI, estableció este tema: “Si quieres promover la paz, protege la creación”. El Sumo Pontífice nos recordaba que “La creación es el comienzo y el fundamento de todas las obras de Dios…aunque es cierto que, a causa de la crueldad del hombre con el hombre, hay muchas amenazas a la paz y al auténtico desarrollo humano integral —guerras, conflictos internacionales y regionales, atentados terroristas y violaciones de los derechos humanos—, no son menos preocupantes los peligros causados por el descuido, e incluso por el abuso que se hace de la tierra y de los bienes naturales que Dios nos ha dado. Por este motivo, es indispensable que la humanidad renueve y refuerce esa alianza entre ser humano y medio ambiente que ha de ser reflejo del amor creador de Dios”.
De igual manera, el Vaticano considera "pecado grave" y un "insulto a Dios" atentar contra el medio ambiente. Al menos así lo expresó el Cardenal italiano Renato Raffaele Martino, en una entrevista que publicó hace algún tiempo un diario de ese país. Y es que, definitivamente, la tierra y sus bienes son un don que podemos usar, mejorar, pero no destruir.
Es más, con la entrada en vigencia de la ley del Nuevo Régimen Sancionatorio Ambiental, aquellas personas que realicen actos perjudiciales contra el medio ambiente podrían afrontar desde trabajo cívico a favor del ambiente, hasta el pago de millonarias multas, de acuerdo al delito cometido. Dentro de este paquete de sanciones estaría: El tráfico de flora y fauna, el deterioro de las cuencas hídricas, deterioro del entorno ambiental urbano, manejo irresponsable de basuras y desechos.
¿Y todavía nos quedan ganas de seguir ‘pecando’ contra nuestro planeta? ¡Piénsalo! Identifica cuál es tu pecado en contra del medio ambiente y cómo puedes enmendarlo. Te sentirás más tranquilo y la madre tierra te lo agradecerá.
Navidad para reconciliarte con la naturalezaEsta época navideña es una oportunidad para mostrar que quieres reconciliarte con la naturaleza:
- Ten cuidado con los elementos que usas para la decoración, no dañes plantas ni bosques para usarlos como artefactos decorativos. Tu casa se verá divina pero la tierra sin duda resentirá.
- Cuando pongas las velitas el 7 de diciembre para homenajear a nuestra Inmaculada Concepción, fíjate que las velas y su esperma no dañen las plantas a su alrededor.
- Las luces navideñas se ven hermosas, pero es un recurso (energía) que estamos derrochando, así que recomendamos establecer horarios para el encendido y estar pendientes de ahorrar en el resto de la casa (y oficina) este preciado tesoro natural.
*Comunicreativos. Colegio Sagrado Corazón. Feligrés unidad pastoral La Transifuración del Señor
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