¿Qué tanto sabes del Día de los Angelitos?
Apartes de una investigación realidad por la Pastoral Infantil de la Arquidiócesis de Barranquilla.
La costumbre del día de los Angelitos está estrechamente ligada a la vocación cristiana de los pueblos del caribe colombiano que, al parecer, recibieron esta herencia de algunas regiones de España, traida por emigrantes que llegaron a nuestros pueblos y trasmitieron su cultura. Esto se puede afirmar, al juzgar por la similitud de las rondas de la población Ibérica con los cantos o estribillos que se entonaban en los orígenes de tradición caribeña, algunos de los cuales aún subsisten.
En la región española de Extremadura se encuentra una tradición que se llama chaquetía, la cual se celebra el día de todos los santos y que inicialmente podía referirse al aguinaldo o estipendio que los niños recogían de sus familiares y vecinos para atender los toques de las campanas del 2 de noviembre (conmemoración del día de los difuntos). Luego, hacían una merienda al aire libre.
La mayoría de personas sabemos que el Día de Todos Los Santos es una fiesta religiosa que se celebra en muchos países de tradición católica el 1 de noviembre; En ella se veneran a todos los santos que no tienen una fiesta propia en el calendario litúrgico.
De esta misma manera, se celebraba hasta hace algún tiempo esta fiesta en la región Caribe y, ¿Qué más inocente y santo que un niño? Por esto, ese día salían los niños vestidos de blanco a pedir un alimento de casa en casa para luego elaborar un sancocho que sería compartido entre todos. Esta costumbre posteriormente se redujo a pedir dulces, tal vez un poco mezclada con una nueva tradición que poco a poco fue desplazando nuestra cultura y fe. Nos referimos a la fiesta que para los días de octubre nuestra comunidad, sobre todo la infantil, había tomado como propia y que era proveniente de Irlanda, luego llegó a Norteamérica y de allí saltó a nuestro país, es el famoso: “Día de Hallowen” o “Día de las Brujitas”.
Los niños inocentes de todo, salían a caminar las calles en las noches, en grupos y algunas veces solos, recorriendo todo su barrio pidiendo de casa en casa dulces para luego consumirlos. Estos niños, entonan un estribillo en coro que resulta siendo, de una manera muy inocente en los niños e ignorante en los más grandes, un mal deseo para quienes no colaboran con ellos dándoles los dulces, promulgado en ocasiones la competencia desleal entre ellos mismos para ver quién de ellos recogía más dulces, quien terminaba más rápido, quien se disfrazaba más feo, hasta llegar al punto de competir por saber quien decía más cosas feas o quien robaba más dulces.
Los niños, habían acogido de manera inocente esta tradición ajena, en su mayoría, inculcados irresponsablemente por sus padres o personas cercanas, guiados por la moda impuesta los medios de televisión y la sociedad consumista.
Como esta celebración se daba en horas de la noche, los delincuentes cobijados por la oscuridad y por la soledad de algunos lugares, aprovechaban para hacer sus fechorías en contra de lo inocente y puro.
Se comenzó a presentar el fenómeno de la aparición de las sectas satánicas que aprovechaban para raptar a niños y causarles daño, según informaciones de la Policía Nacional, también se presentaba la modalidad del secuestro extorsivo, violaciones e intoxicaciones con narcóticos o vidrio molido que era suministrado en los dulces que se les daban a los pequeños.
Es por esto que, desde la Comisión Arquidiocesana de Pastoral Infantil, hacemos un llamado al rescate de nuestras tradiciones, a cuidar nuestros niños y niñas e inculcar en ellos los valores, a promover el Día de los Angelitos en cada uno de los sectores, colegios y parroquias bajo el estribillo:¡Ángeles somos del cielo venimos pidiendo limosna para nosotros mismos. Ángeles somos del cielo bajamos, pidiendo la paz para los colombianos!
*pinfantilbaq@yahoo.es
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Gracias por tus comentarios. Evita usar palabras obsenas y ofensivas.