miércoles, agosto 26, 2009

Vivir el Año Internacional de la Atronomía
Por Departamento de Comunicaciones FUNADE*
Durante el 2009 se conmemoran los 400 años en que Galileo Galilei apuntó por primer vez a los cielos con un telescopio. Por tal motivo, la Unión Astronómica Internacional lo declaró como el Año Internacional de la Astronomía. Los festejos no se hicieron esperar, desde el 1 de enero en París, se reunieron delegados del mundo entero para dar inicio a esta importante fecha.

Ustedes se preguntarán: ¿Qué es la Astronomía?, pues bien, la Astronomía es la ciencia que se ocupa del estudio de los cuerpos celestes, los fenómenos ligados a ellos, su registro y la investigación de sus orígenes a partir de la información que llega a través de la radiación electromagnética. La Astronomía moderna es además una ciencia que impulsa el desarrollo de la tecnología avanzada y estimula la inclusión de la niñez y la juventud en el complejo mundo de la actualidad.

Conozcamos el Skyler Cafam
La Fundación Arquidiocesana de Educación – FUNADE- en su afán de ofrecer a la comunidad estudiantil herramientas y procesos de gran calidad, que conjuguen perfectamente lo lúdico con lo educativo, trae invitado desde Bogotá el Skyler Cafam, un cine domo virtual portátil, el más grande en Latinoamérica y que cuenta con la última tecnología en audio e imagen, proyectando a través de un domo de ocho metros de diámetro, un video que permite tener una experiencia de inmersión que hará entrar a sus visitantes en la acción que está ocurriendo en la pantalla.

Los viajes que emprendes con Skyler pueden parecer ciencia ficción, pero en realidad están basados en observaciones científicas, datos y modelos auténticos. Skyler cuenta con un sistema de proyección digistar 3SP2, más de 1.5 millones de píxeles de resolución, un sistema de audio base de alta calidad y fidelidad, sonido sound round, autonomía eléctrica para más de 12 horas de proyección y, sobretodo una tripulación altamente calificada.

Skyler Cafam está dirigido a todos aquellos que están interesados en combinar el entretenimiento con la ciencia y la tecnología, siguiendo la línea mundial al conmemorarse en el 2009, el Año Internacional de la Astronomía, según la UNI (Unión Astronómica Internacional)

Skyler Cafam por su movilidad es único en el mundo y por su calidad en imagen y sonido, único en el país, de esta manera, sumerge a sus tripulantes en una experiencia incomparable con el mundo exterior.

Los viajes de este espectacular cine móvil serán a partir del 24 de agosto y finalizarán el 24 de septiembre, estará visitando los colegios Arquidiocesanos: San Pancracio, en el municipio de Soledad, Seminario Conciliar San Luis Beltrán, ubicado en el barrio Ciudad Jardín y el colegio Arquidiocesano Enrique Niessen en el barrio Paraíso, también tendrá destino en los mejores colegios de la ciudad que han decido trasladar el domo hasta sus instituciones. Cabe resaltar, que los estudiantes atlanticenses al interesarse en visitar Skyler – Cafam, demuestran lo importante que es para ellos vivir experiencias novedosas, las cuales despierten el interés por ciencias nuevas y hagan vivir diferentes emociones.

Skyler-Cafam es un proyecto educativo que va de la mano con el Grupo Astronómico Orión-Funade, el cual es desarrollado por los estudiantes arquidiocesanos, allí se realizan jornadas de observación, talleres de capacitación permanentes, creación y lanzamiento de cohetes, teniendo como misión despertar interés y curiosidad en los estudiantes por conocer los últimos avances científicos y tecnológicos, así como al importancia que estos tienen en la sociedad.

La invitación está extendida a todos los niños, jóvenes y padres de familia del departamento del Atlántico que quieran vivir una experiencia fantástica y novedosa, motivados por el afán de ser ciudadanos del mundo en este Año Internacional de la Astronomía. ¡El universo está para que lo descubras!

Mayores informes Sede Administrativa Funade, ubicada en la Cra 69 No 81B-36. Teléfono: 3730702-3559223. Celular: 300 625 42 33 - 300 684 31 17

* Fundación Arquidiocesana de Educación FUNADE
¡Hablemos de Vocación!
Por Alexi Javier Mattos Gutiérrez, Pbro*

Se habla de muchos aspectos, se dialoga sobre temas de interés del momento, pero: ¿se habla de lo que soy, de lo que debo ser? En el mundo actual nos encontramos que se habla muy poco de lo fundamental y esencial para la vida, y hasta en ocasiones, se obvia tocar el tema. En los ambientes familiares se habla del programa de la televisión, del dinero para la ropa, pero nos encontramos que del tema sobre el sentido de la vida y del proyecto de vida casi nada se habla; en el ámbito estudiantil se toca el tema muy someramente y si se logra hacer algo, es enfocado exclusivamente a una carrera universitaria que al fin y al cabo necesita estar enmarcada en una vocación; si es en nuestros ambientes parroquiales se ha escuchado hablar muy tímidamente de vocación. Por lo tanto, se hace urgente en este tiempo actual, hablar de vocación, del llamado que Dios hace a todos a ser felices desde el don que cada uno tenga.

La vocación y la profesión aunque son dos realidades diferentes se enriquecen: la profesión hace parte de una realidad funcional, en la que cumplo horarios, hago parte de una empresa y es hasta cambiable si es el caso de estudiar otra; en cambio la vocación es una realidad existencial porque hace parte del ser de cada uno. Es necesario puntualizar que vocación y profesión no se contradicen, se enriquecen. Nos encontramos con la vocación de ser padres de familias en la que los esposos tienen una profesión que enriquece la vida familiar, por su parte, en el caso de muchos sacerdotes existen aquellos que a demás de tener la vocación sacerdotal se han formado profesionalmente.

¿Quién no desearía ser auténticamente feliz?, pero, ¿Dónde se encuentra la felicidad? No vengo con un portafolio para ser feliz, porque ésta no se haya en cosas ni en situaciones, sino en la persona de Jesucristo que en si mismo contiene el sentido de la vida porque Él es el camino, la verdad y la vida. Cuando sucede la experiencia de encontrarse con Cristo de manera personal descubriéndolo como la razón de ser, puedo de esa misma manera encontrarme conmigo mismo, autodescubriéndome y a la vez descubrir a mi prójimo. Si nos damos cuenta es una cadena de vida: Cristo me da la vida, para darme en servicio y fraternidad. Toda la experiencia con Jesucristo desemboca en la vocación que nos da, la cual hay que despertarla y enriquecerla para llegar a ser lo que Dios quiere y el mundo necesita.

como Iglesia que camina en el departamento del Atlántico, estamos empeñados en Hablar de Vocación, pero a medida que hemos venido avanzando, tomamos conciencia que el trabajo de hablar de manera especial de la vida sacerdotal es un compromiso de todos, por lo tanto, quiero invitarte para que hables de Cristo, quien es el que sigue llamando a muchas personas (niños y jóvenes) a ser sacerdotes para siempre y además nos anuncia que vale la pena entregarle la vida a Dios, pues no nos quita nada, lo da todo.

* Delegado Arquidiocesano para la Pastoral Vocacional
Catedratón 2009
Presencia viva del amor de Dios
Gracias a la generosidad y la solidaridad de un pueblo que tiene fe y ama a su Iglesia, damos testimonio del inmenso amor de Dios y la intercesión de la Virgen María, que permitieron que el pasado 2 de agosto, en el Salón Jumbo del Country Club, se convirtiera en un día inolvidable para la Arquidiócesis de Barranquilla, pues recibimos la Gracia de superar la meta propuesta inicial de 800 millones de pesos, antes de la hora del cierre de la Catedratón 2009.

Desde el gran acto de apertura a las 10:30 de la mañana, la Catedratón cautivó al público presente, a los televidentes de Telecaribe, TB3, Canal 23 de la Universidad Autónoma del Caribe y la Web TV de la Emisora Minuto de Dios, así como a los oyentes de las emisoras radiales que seguían minuto a minuto esta iniciativa de solidaridad.

La presentación de los 28 templos que son fruto de la Catedratón en estos seis años de Siembra, junto a la imagen de la Catedral Metropolitana María Reina, madre de todos los templos en el Atlántico, los seminaristas y los sacerdotes ancianos y enfermos que viven en la Casa Sacerdotal, permitieron que esta Siembra de Paz haya sido abonada en terreno fértil, lleno de mucha esperanza. Al transcurrir la Catedratón, el Señor se mostraba bondadoso con nuestra Iglesia y la Cosecha continuaba, pues la solidaridad y la generosidad de muchos sembradores seguía presente en el Salón Jumbo del Country Club.

La presentación de artistas, danzas y grupos musicales durante toda la jornada de Catedratón, permitieron que el público presente y los televidentes pudieran contribuir con sus semillas de amor en esta obra para la evangelización a través de donaciones en dinero, en materiales, en trabajo comunitario.

Esta gran jornada de música, oración y fraternidad se convirtió en un verdadero milagro de amor, pues faltando seis minutos para las 4:00 de la tarde, se anunciaba con gozo la grata noticia de que la meta había sido superada.

CATEDRATÓN 2009
Llenos de gran alegría, al cierre de esta edición, el consolidado de las donaciones realizadas hasta el momento, superan los 1000 millones de pesos que se convierten en la más grande manifestación de amor del Señor, permitiendo que pronto más zonas pobres del departamento del Atlántico puedan contar con un templo parroquial que contribuya al mejoramiento de la calidad de vida de sus habitantes; de igual manera permitirán apoyar a los seminaristas en su proceso de formación, a los sacerdotes que guían a las comunidades en las zonas más pobres y a los sacerdotes ancianos y enfermos que han dedicado toda su vida al trabajo pastoral. La donación de terrenos, la futura construcción de un templo parroquial, la vinculación de empresas y personas de buen corazón que han anunciado el mantenimiento y adecuación de los futuros templos, también han sido una gran bendición para Catedratón 2009, pues muy pronto más comunidades serán bendecidas con la construcción de la Casa de Dios en medio de sus hogares.

El Arzobispo de Barranquilla, monseñor Rubén Salazar Gómez, junto a sus Obispos Auxiliares, monseñor Luis Antonio Nova y monseñor Víctor Tamayo dieron la bendición y colocaron en manos de la Virgen María, gran madrina de la Catedratón, esta jornada de solidaridad, en compañía de María Patricia Dávila gestora y conductora principal de Catedratón.

El gran acto de apertura de Catedratón 2009 fue inigualable: 31 niños mostraron los frutos de esta Siembra a lo largo de estos 6 años a través de corazones representativos de los 28 templos construidos en algunas zonas de Barranquilla y los municipios del Atlántico, la Catedral Metropolitana, el Seminario Regional Juan XXIII y la Casa Sacerdotal. El grupo musical Misioneros del Amor de Cristo y el Coro de la Arquidiócesis de Barranquilla en compañía del Sacerdote Carlos Hernández y dos seminaristas, interpretaron el himno de la Catedratón, con la coreografía artística de la Escuela de Danzas de Wilman Payares.

El apoyo de la Alcaldía Distrital de Barranquilla, en cabeza del Señor Alcalde Alejandro Char Chaljub, no se hizo esperar. En compañía de su esposa Katia Nule, sus hijos, la Secretaria de Hacienda, Elsa Noguera, la Secretaria de Educación, Lucía Robles y la Secretaria de Planeación, Maria Elia Abchaibe, dieron el primer aporte para la Catedratón 2009, con una donación de 200 millones de pesos.

El Gobernador del Atlántico, Eduardo Verano de la Rosa, junto a su hijo Sebastián, su esposa Liliana Borrero de Verano, el asesor de la Gobernación Dr. Rodolfo Zambrano, anunciaron en la suma de 125 millones de pesos su aporte de solidaridad para seguir sembrando paz y amor en el departamento del Atlántico.

Sin importar la distancia que tuvieran que recorrer, las comunidades parroquiales de la Arquidiócesis de Barranquilla, se hicieron presentes en la Catedratón 2009 y entregaron sus donaciones, producto de bazares, rifas, desayunos y diversas actividades programadas para apoyar la Catedratón desde cada unidad pastoral.

El segundo piso del salón Jumbo del Country Club, fue el lugar escogido para que los asistentes a la Catedratón, disfrutaran de exquisitos platos culinarios, postres y bebidas. Gracias a la coordinación de doña Rosita de Tcherassi, los restaurantes, hoteles y colonias extranjeras de la ciudad, se hicieron presentes como en años anteriores en la Catedratón.

La gran novedad para la Catedratón 2009, fue la Tienda de Ropa, fruto del ingenio y la creatividad de los futuros sacerdotes que se forman en el Seminario Regional Juan XXIII. Con precios sorprendentemente bajos nadie quiso perder la oportunidad de adquirir una prenda de vestir y así contribuir con su aporte en la Catedratón.

Los mimos con su sonrisa y su carisma, recibían e invitaban a contribuir a chicos y grandes que se acercaron al salón Jumbo del Country Club para vivir la Gran Fiesta de Solidaridad en el Atlántico.

La Web TV de la emisora Minuto de Dios, junto a todo el equipo que conforma este medio de comunicación, se hizo presente en la Catedratón 2009, transmitiendo minuto a minuto los detalles de esta gran obra para la evangelización en nuestro departamento del Atlántico. La presentadora Vanessa Saldarriaga fue la encargada de mostrar a los televidentes cómo las unidades pastorales organizaron actividades para la consecución de recursos para la Catedratón.

Con entusiasmo y alegría los asistentes disfrutaron de grupos musicales y danzas presentes en la Catedratón 2009, quienes mostraron en esplendor su talento.

El canal Telecaribe, TB3 y Canal 23 de la Universidad Autónoma del Caribe hicieron posible la transmisión en directo de la Catedratón 2009, bajo la dirección de Doménico Restrepo, quien por primera vez se vincula con su talento y equipo de trabajo a la Catedratón, permitiendo que una vez más nuestros canales de televisión trabajaran unidos, como verdadera familia de Dios, para llevar hasta los hogares la información más completa de esta obra de solidaridad.

La juvenil cantante Barranquillera, Sofía Dacarett Char, interpretó con su melodiosa voz el ‘Avemaría’ y ‘Cantaré, cantarás’, con arreglos del maestro Chelito de Castro, el acompañamiento del Coro que dirige Rocío de la Rosa y el ballet de Rossana Lignarolo. Este gran montaje fue el encargado del cierre de Catedratón 2009, que conmovió a los asistentes y unió en una sola voz a la comunidad allí reunida quienes coreaban la canción ‘Cantaré, Cantaras’ agradecidos por el éxito de la maravillosa Catedratón 2009.

Encuentros con el Arzobispo

La Radio en la Evangelización
Por Julio Giraldo*

Julio Giraldo: Hace pocos meses, la emisora “Minuto de Dios” cumplió 17 años de estar al aire en Barranquilla y ayer, 15 de agosto “Radio María” cumplió 12 años de presencia con su frecuencia en nuestra ciudad. ¿Qué tan importante son estos medios radiales dedicados completamente a la evangelización?

Arzobispo: La presencia en nuestro medio de estas dos emisoras católicas, dedicadas a evangelizar de tiempo completo, adquiere toda su importancia cuando consideramos cómo el mundo de hoy recibe de forma permanente el impacto de los medios de comunicación social. Éstos se han convertido en los grandes educadores de la sociedad: ellos difunden las ideas, los criterios, los modos de ver, los modos de considerar la realidad, los modos de vivir. El cambio cultural profundo que estamos viviendo –este cambio de época que afecta a todos los estamentos de la sociedad- se ha debido a los medios de comunicación que han invadido todos los terrenos, y han logrado llegar hasta la intimidad de los hogares.

A ellos se debe que el mundo entero se haya convertido en “una aldea global” –como lo afirmaba el gran filósofo de la comunicación McLuhan a finales de los años 60- en la que se ha creado una “cultura global” que no siempre responde a los mejores intereses del ser humano.

En los últimos años, especialmente, se ha ido deteriorando en forma alarmante la calidad de esa cultura que se transmite por los medios de comunicación, que con frecuencia no logran librarse de un pansexualismo alarmante, de una exaltación permanente de la violencia, de la tergiversación de la realidad por el afán de la noticia impactante.

En este contexto, “El Minuto de Dios” y “Radio María” ofrecen la oportunidad a muchas familias, a muchas personas, católicas y no católicas, de recibir un mensaje sano, orientador, capaz de ayudar a encontrar el verdadero sentido de la vida tanto individual como comunitaria. Con su transmisión permanente están llevando a todos los oyentes el rostro de Cristo que nos revela al Padre de misericordia que ama, con las entrañas de una madre, a todos los seres humanos y que nos ofrece su Espíritu para que podamos encontrar juntos los senderos de la vida. Se convierten así, en oasis refrescantes en medio de la aridez de la vida diaria, tantas veces amenazada por el sin sentido, ofrecen a los fieles la oportunidad de orar, de reflexionar, de encontrar la solución a muchos problemas morales y sociales.

J. G: ¿Cree Usted, señor arzobispo, que la Iglesia está haciendo una presencia suficiente en los medios de comunicación? ¿Cuál sería el ideal de esta presencia?

Arzobispo: Es perfectamente claro que, dada la importancia creciente de los medios de comunicación, la presencia de la Iglesia no siempre es suficiente. Me refiero tanto a los medios propios –canales de televisión, emisoras, periódicos, páginas de Internet- como a la presencia con programas especiales en los medios pertenecientes a otras entidades. En la actualidad se están haciendo grandes esfuerzos para aumentar esa presencia que, a mi juicio, se hace cada día más necesaria. Ya no basta el púlpito (como se denominaba en otras épocas a la predicación dentro de las celebraciones litúrgicas) sino que es necesario recurrir a todos los medios que nos ofrecen las técnicas modernas de comunicación social no sólo en los medios que acabo de mencionar, sino también con la utilización de los métodos de la publicidad y la propaganda. El ideal sería poder combinar todos los recursos que nos ofrecen los medios modernos para que el mensaje del Evangelio llegue de mil formas diferentes a todos los públicos y logre suscitar en ellos alguna respuesta.

J. G: ¿No suena esto a afán de proselitismo?

Arzobispo: En la homilía de la gran celebración eucarística presidida por el papa Benedicto XVI en Aparecida, Brasil, como preludio de la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe, el santo Padre decía: “La Iglesia no hace proselitismo. Crece mucho más por "atracción": como Cristo "atrae a todos a sí" con la fuerza de Su amor, que culminó en el sacrificio de la cruz, así la Iglesia cumple su misión en la medida en que, asociada a Cristo, realiza su obra conformándose con el espíritu y concretamente con la caridad de su Señor.” Éstas son palabras realmente esclarecedoras. No basta la transmisión del mensaje por los medios, sino que es necesario “atraer” con la fuerza del testimonio del amor vivido en comunidad. Y esta afirmación me permite completar la respuesta anterior. La proclamación del Evangelio a través de los medios no es sino un complemento de lo que tiene que ser el testimonio permanente de la Iglesia al mundo: mostrarle con la existencia concreta de sus fieles, reunidos en comunidad, cómo la vida se llena de sentido, de fuerza, de alegría, cuando se acepta a Cristo en el corazón, se lo celebra en la Liturgia, y se lo testimonia con el servicio desinteresado a los demás. Por esta razón, la tarea que realizan “El Minuto de Dios” y “Radio María” viene a reforzar el trabajo que estamos realizando en nuestra Arquidiócesis con la metodología de la misión permanente. Tratamos de llegar personalmente a cada uno para invitarlo a salir de su apatía y marginación y empezar a participar activamente en la vida de una comunidad que experimenta con gozo creciente la presencia del Señor resucitado en su seno y que se siente llamada con fuerza a llevar a los demás esa experiencia. Y, de esa manera, estas emisoras católicas –a las que estoy profundamente agradecido y por las que pido permanentemente al Señor- se convierten en una ayuda cada día más necesaria.

Parroquias Ayer y Hoy

Catedral Metropolitana María Reina
La iglesia Madre
Por Julio Giraldo*

Es extensa y muy bella la historia de nuestra majestuosa Catedral, convertida hoy en el símbolo religioso, cultural y arquitectónico de la ciudad; pero en esta crónica más que contar su historia, queremos dar a conocer cuál es la realidad de este bello templo veintisiete años después de su bendición e inauguración solemne. Hoy agosto de 2009, se encuentra como párroco el Padre Rafael Ahumada quien nos cuenta cómo se desarrolla la vida pastoral en la Iglesia madre de todas las iglesias de la Arquidiócesis, y cuales son las necesidades materiales de un templo que por su tamaño y especificaciones especiales, requiere de grandes inversiones y de mucha sabiduría de quien lo dirige, para mantenerlo acorde a su realidad arquitectónica. Nos dice el Padre Rafael, que la Catedral como toda parroquia, también tiene una comunidad con una vida pastoral activa, igualmente como lo plantea el nuevo plan de pastoral, se tienen ocho sectores con sus respectivos núcleos y asambleas familiares; existe una pastoral familiar muy activa que se encarga de preparar las nuevas parejas que contraerán matrimonio y animan las eucaristías familiares; igualmente se trabaja con los grupos juveniles y existe un maravilloso grupo que se encarga de la pastoral litúrgica que en la Catedral debe ser especial y con mucha preparación teniendo en cuenta que es aquí en donde se celebran los acontecimientos religiosos más relevantes de nuestra arquidiócesis. En pocas palabras, la parroquia “María Reina”, camina bajo los parámetros de la nueva evangelización.

En cuanto a la parte material, se tiene desde el inició de la Catedral, un grupo de distinguidas personas encabezado por Cielo Támara quienes se encargan de la difícil misión de liderar campañas que permitan el mantenimiento de la monumental obra, considerada la Catedral más grande de Colombia, y que por su tamaño y características, requiere de grandes inversiones anualmente; no es un pecado decir, que nuestra Catedral aún se encuentra sin terminar ya que faltan muchas cosas a pesar de todo el esfuerzo que se ha hecho, una de las necesidades más urgentes en la actualidad, es la reparación de los vitrales que por acción de los vándalos han sido destruidos y porque no decir también. la acción del tiempo los ha deteriorado. Cuando se acerca una nueva fiesta patronal, como católicos debemos recordar que nos corresponde ser solidarios y generosos con la Catedral que es la madre de todas las iglesias de la Arquidiócesis y es también la joya más preciosa de la Ciudad. Para ilustración de nuestros lectores, esta es la Catedral en cifras: El área total del lote es de 12.261 mts2., el área de construcción es de 4.274 mts2. El área del templo es de 3.302 mts2. El área de la placa paraboloide (techo) es de 3.094 mts2.

Datos Interesantes
En la obra de la Catedral, se han empleado: 286 toneladas de hierro redondo. 127.800 sacos de cemento gris. 36.850 sacos de cemento blanco. 49.200 ladrillos corrientes. 40 toneladas de Revestiplast mármol. La Catedral tiene: 92 metros de largo, 38 metros en la parte más ancha ya que la Catedral tiene una forma acampanada que se va estrechando en el ábside del presbiterio. Tiene 38 metros de altura en la parte más alta y caben 4.000 personas cómodamente sentadas.
Vitral Superior.

Vitral Superior
En los altos del frontis hay un vitral de la Santísima Virgen bajo la advocación de María Reina, que nos recuerda que la Catedral está dedicada a ella, A sus lados están los símbolos e los cuatro evangelistas en las figuras de los cuatro animales: San Juan, el águila, San Marcos, el león; San Mateo, el toro; y San Lucas, el ángel.

Decoración Interna
Se destacan dos grandes mosaicos: Entrando al lado derecho: San José, patrono de la Arquidiócesis de Barranquilla. Entrando al lado izquierdo, María Reina, titular de la Catedral Metropolitana. Estos mosaicos tienen 16 metros de alto por cinco metros de ancho en su medida total y cada una de las figuras mide nueve metros de alto. Todo lo anterior, sin hablar del gran Cristo liberador y el significado de todos sus vitrales, nos llevan a pensar en la magnitud de nuestra Catedral en la que debemos poner nuestros ojos y colaborar en forma permanente para su sostenimiento.

* Periodista - Historiador/julioetica@yahoo.com

De Mujer a Mujer

La seguridad de la discípula de Cristo está en el Señor
Por Jaynes Hernández Natera*

“Quien cree en Dios, nunca está solo”, Benedicto XVI pronunció esta frase felizmente en el año 2006, en una homilía en Baviera. Feliz la leí y me dije: “Es cierto, Dios no abandona a quienes confiamos en Su providencia, en Su capacitación, pues soy la primera en aprender algo nuevo con cada artículo de la sección de mujer a mujer”.

La Gracia de Dios siempre acompaña a las mujeres que creemos con fe, con la seguridad que Dios no nos abandona, por eso y con gozosa docilidad escribimos, hablamos, cantamos, oramos, predicamos y evangelizamos como laicas comprometidas, muchas formamos parte de grupos apostólicos, pastorales, voluntariados y otras consagramos nuestras vidas al servicio en los colegios, hospitales, cárceles y en las misiones.

¿Cómo te identificas?
Amigas, somos hijas de Dios, cuando creemos en la paternidad divina; cuando somos discípulas de Jesús; al tener un encuentro con Jesús vivo, le escuchamos, le creemos y seguimos en la vocación a la vida cristiana; también somos hijas de Dios, cuando hemos respondido a la vocación a la cual fuimos llamadas por Él y a través de esta, vamos a su encuentro representado en el prójimo.

Nuestra alma al estar enamorada de la misión evangelizadora de Jesús, nos convierte en misioneras que siguen siendo discípulas, pero además tienen una vocación al servicio, son totalmente desprendidas del yo, conscientes que es Él quien vive en nosotras, vacías de lo inútil, llenas de Su Amor, fortalecidas en la virtud de la generosidad y la humildad, viviendo feliz el apostolado. Recordemos: “Aunque pase por quebradas muy oscuras no temo ningún mal, porque tú estás conmigo, tu bastón y tu vara me protegen” (Salmo 23,4).

Te has preguntado: ¿Por qué sí creo en Dios, no siento la seguridad de ser discípula de Cristo?
Amigas, es que toda discípula cree que Cristo es el Señor, su salvador, que la sana, bendice y libera, pero no todas las mujeres que creen, se atreven a dar un paso adelante ni están dispuestas a aportar ideas que solucionen las dificultades de su entorno, de la parroquia o no se preocupan por hacer actividades evangelizadoras en sus hogares, es decir, creen por simple costumbre pero no son capaces de vivir la fe en plenitud.

La mujer creyente y discípula del Señor

Para ser discípula de Cristo sólo se necesita la disponibilidad, humildad, fidelidad, obediencia, sobriedad, liberarse de apegos, conocer las debilidades y las fortalezas, hacer el esfuerzo de conversión permanente, vida de oración, servicio y gratitud.

Siempre muchas mujeres tienen alguna excusa ante el tiempo para dedicarle a Dios. Muchas no le brindan el espacio que se merece porque se encuentran desmotivadas al no tener un trabajo, por estar enfermas, otras por la edad, algunas dicen que cuando enviude, cuando los hijos crezcan o cuando estén pensionadas y muchas otras excusas.

Yo les recomiendo, que piensen que en realidad Dios se merece el mejor espacio, cuidado y ser el principal pensamiento en nuestras vidas. Yo las invito a que escuchen dos emisoras católicas y canales de televisión de nuestro país que a través de la música y programas espirituales permiten un encuentro con nuestro Padre. También pueden asistir a las asambleas familiares, los cursos bíblicos gratuitos que existen en diferentes unidades pastorales, y lo principal que por supuesto está nuestro alcance, el Espíritu Santo, Él sólo espera que lo invoquemos para venir a nosotras. Muchas veces en vez de pedirle al Espíritu Santo, preferimos vivir en el mundo de la moda y la sociedad de consumo, que promocionan frases como: “Siéntete segura cuando caminas, si usas este producto ó Disfruta un fin de semana segura si.., entre otras.

También nosotras hemos fallado
Las que creemos y le seguimos de una u otra manera hemos fallado. No sólo la sociedad de consumo tiene la culpa en la influencia que ejerce en el público al promocionar la seguridad en lo externo, sino también nosotras, ya que poco o nada promovemos que quien cree en Cristo lo tiene todo y quien es feliz porque cree en Cristo está seguro de amar a través del amor sin límites que nuestro Señor nos da; tengamos presente que el auxilio de María nos ayuda a ser discípulas, que Jesús está presente en los sacramentos, que ser adoradores eucarísticos nos capacita para entender lo que Dios quiere de nosotras y debemos ser el testimonio vivo de estar siempre seguras con Cristo en todo momento. Estamos en estado de misión y todas las mujeres somos necesarias para la Iglesia que Dios quiere, por eso, demos a conocer la noticia a nuestras amigas.

Aún estamos a tiempo de reparar las omisiones por no haber sido oportunas al hablar del primer llamado que nos hace Dios a la vida, al amor, a ser Mujer, a ser mujer de Iglesia, a ser discípula-misionera. Anota la fecha en que tomes la decisión, y para las amigas que ya han tomado esta decisión, es el tiempo de celebrar y alabar a Dios por la Gracia concedida para perseverar.

Si te preguntan: ¿Cómo adquirir seguridad al creer en Cristo?
Responde que la seguridad está contenida en la fe, la fe es un don y hay que tener buena disposición para recibirla en la oración y transmitirla en la familia desde la Palabra de Dios y con testimonio coherente entre lo que se cree y se vive, hay que orar para creer, para que lo que se cree sea a la luz de Dios; identificar en que creemos, porque católicas creyendo en elementos de la nueva era, es inconcebible, así como lo es el no creer en la Gracia de los sacramentos. Creamos totalmente en Dios que nos ama. “En el amor no cabe el temor y el amor desaloja el temor” (1 Juan 4,18).

*Integrante de la Comisión de Pastoral Vocacional. jaynesher@hotmail.com
Caridad en la verdad, un nuevo grito de Dios para la que la humanidad
Por Fulbio de Jesús Labastidas Charris*


Sin duda alguna, al leer la última carta encíclica CARITAS IN VERITATE escrita por su santidad Benedicto XVI, no podemos menos que descubrir en ella, un grito desesperado de Dios a toda la humanidad; un grito en el que se llama al hombre y a la mujer de hoy a la reflexión interior y, a que se descubra en ella, la importancia y la riqueza de que el ser humano persona, es más que un individuo que consume y gasta dinero a montones y que todo lo puede comprar, es más que un individuo que se gasta la vida en conseguir metas y metas para tener más o para hacer más cosas, que la vida humana es más que todo eso, que es la posibilidad de descubrirse un ser creado por Dios por amor pleno; que es la posibilidad de construirse como un ser integral, en el que todos los aspectos de esa misma vida son importantes para esa integralidad; que aspectos como reconocerse único e irrepetible, la relación con los otros a nivel social, la fortaleza de la familia, el estudio, la espiritualidad, la vida de oración que permita una excelente relación con Dios, la solidaridad, el descanso y el desarrollo cultural, son aspectos que sin duda bien integrados y equilibrados conducen a la verdadera felicidad del hombre, pues son aquello que permite encontrarle sentido real y pleno a la vida de cada uno.

Hoy por hoy, el hombre se ha centrado todo en el aspecto económico como único elemento necesario para la realización personal y social; es así como se puede observar, que los hogares cada vez más se desintegran y debilitan por el afán de conseguir más dinero a costa de los tiempos para compartir como verdaderas familias; que las organizaciones empresariales se preocupan sólo por obtener más utilidades a costa de la explotación antihumana que nace del ignorar a los trabajadores y empleados como personas integrales, como seres humanos y reducirlos a simples entes productivos que no experimentan sentimientos; que los gobiernos se preocupan sólo por construir obras en serie y agotar presupuestos, más que en el desarrollo real e integral de las comunidades que se les ha confiado; que las organizaciones educativas de orden primario, medio y superior, se preocupan más por ser competitivas entre ellas y garantizar su permanencia en el tiempo, que por diseñar e impartir programas educativos integrales que le devuelvan a los seres humanos la esperanza y la confianza en que son los protagonistas de su propia existencia y que el conocimiento real, es una herramienta que puede transformar la humanidad y llevarla a la perfección y plenitud. Sin duda todo ello, es lo que el buen Dios reclama hoy por hoy, por medio de un grito desesperado en manos de Benedicto XVI, a quien ha confiado sabiamente la conducción de la Iglesia en esta etapa cronológica de la humanidad.

Caridad en la Verdad, es sin duda, una lectura obligatoria para el hombre y la mujer de hoy, para el joven de hoy, para los educadores de hoy, para los gobernantes de hoy, para los profesionales de hoy, para los religiosos y consagrados de hoy; es un documento que debe ser leído, analizado, discutido y escrutado hasta el fondo más profundo de sus letras, para poder descubrir en ellas ese llamado de Dios, a darle a cada aspecto constitutivo de la vida del hombre su verdadero valor y riqueza.

Amor y Verdad, han sido siempre la brújula que puede guiar al hombre al encuentro de su felicidad; en amor hemos sido creados y somos sostenidos, el mismo Dios que nos creo es el amor perfecto y al ser creados a imagen y semejanza de Dios, somos también fuente inagotable de amor, una fuente que debe estar siempre activada para nutrirnos a nosotros mismos y para nutrir a todo aquel que se acerque, a todo aquel que en el ejercicio de la Caridad se hace nuestro hermano universal. En verdad debemos caminar y conducir la vida, verdad es aquella definición que en Jesús, Dios hace de sí mismo, al proclamarse como la verdad misma y al afirmar con certeza plena, que sólo el encuentro con la verdad nos hará libres; cabe entonces resaltar aquí, que en un mundo que camina de espaldas a la verdad y en el que todo individuo, construye y proclama su verdad de acuerdo a lo que le conviene, es necesario hacer un alto y tomando a Jesús y sus enseñanzas como referente, como verdad plena, descubrir en ella el sentido real por el que debemos conducir nuestra vida.

El hombre de hoy en un mundo de crisis económica como la actual, debe descubrir que su tarea en la vida es ser feliz y que para ello el mismo Dios, ha trazado un proyecto en el cual lo importante es que cada uno descubra en sí mismo, la riqueza que puede y debe compartir con el hermano. Amor y Verdad, son un llamado permanente a que el hombre de todos los tiempos, entienda que no sólo de pan vive el Hombre; que debe ser consciente de su responsabilidad con el mismo y con los demás, que aquellos que tienen más y de sobra, deben analizar que lo que nos sobra, no es totalmente nuestro, que ese pedazo de pan que sobra en tu despensa o en tu refrigerador, son el pan que hace falta en la boca del hermano que muere de hambre en cualquier sociedad del mundo; que aquel dinero que sobra en mi cuenta bancaria, es aquel dinero que falta a un hombre para ser atendido en un centro de salud y que por ello, muere prematuramente a falta de atención medica. Que fácil y maravilloso sería, que todos tomáramos conciencia que sólo compartiendo lo poco o lo mucho que tenemos, hacemos realidad el amor, y de esa forma, se hace presente el Reino que tantos ansiamos y que tanto alejamos con nuestras acciones diarias, mientras clamamos al cielo esperando que nos llegue, como algo mágico, de un mundo alejado, en el que no hemos incluido a Dios, sacándolo de nuestra realidad cotidiana.

* Comisión Arquidiocesana Pastoral Juvenil

lunes, agosto 10, 2009

PORTADA


Encuentros con el Arzobispo

La vida
Por Julio Giraldo*

Jesús es el único dueño y Señor de la vida como lo expresaron los obispos y arzobispos de Colombia en la Octogésima Séptima Asamblea Plenaria del Episcopado colombiano, la cual se llevó a cabo en el mes de y cuyo tema central fue la vida. Hoy, nuestro Arzobispo, también Presidente de la Conferencia Episcopal, Monseñor Rubén Salazar Gómez, se referirá a este tema que preocupa a tantos colombianos debido a las situaciones que se presentan en nuestros días, las cuales destruyen y van degradando este regalo divino.

Julio Giraldo: Un hecho preocupante en la actualidad es el desprecio por la vida en Colombia. ¿Cómo ve Usted esta situación?

Arzobispo: Los atentados contra la vida se multiplican hoy desgraciadamente, en nuestra patria. Hay amenazas que proceden de la naturaleza misma, pero que hubieran podido ser evitadas o que se agravan por la desidia culpable y la negligencia de aquellos que muchas veces podrían evitarlas o que son fruto de la destrucción del medio ambiente en búsqueda de un lucro irracional. Hay amenazas contra la vida como fruto de situaciones de violencia, odio, intereses contrapuestos que nos llevan a agredirnos unos a otros con homicidios, guerras, matanzas y genocidios, como lo experimentamos día a día en nuestra patria; amenazas éstas que se agigantan con el comercio de armas en el nivel internacional, pero también al interior de los países. Hay amenazas contra la vida que nacen de la injusta distribución de las riquezas de la tierra que condena a millones de personas en el mundo a la miseria, al hambre, a la enfermedad, a la muerte prematura. Hay amenazas contra la vida que nacen del comercio de drogas, de la trata de personas, de la prostitución, de la implementación de modelos de sexualidad que, además de ser destructores del amor, son también portadores de graves riesgos para la vida. Hay amenazas contra la vida que nacen de un desconocimiento de la dignidad humana del feto no nacido, o de la sacralidad de la vida del enfermo terminal o del anciano inútil.

J. G:
¿Qué hay detrás de estas situaciones? ¿Por qué hemos llegado hasta aquí?

Arzobispo: ¿Cuáles son las causas de estas amenazas? En el fondo hay una profunda crisis de la cultura del mundo en el que vivimos hoy. Crisis originada por el poner en tela de juicio los fundamentos mismos del saber y de la ética que hace cada vez más difícil ver con claridad el sentido del hombre, de sus derechos y de sus deberes. A esto se añade una situación de descomposición del tejido social fruto de las dificultades, causadas por la complejidad creciente de la sociedad, en la que las personas, los matrimonios y las familias se quedan solas con sus problemas. Por otra parte, en nuestra patria sobre todo, son cada día más frecuentes las situaciones de pobreza extrema, angustia o desesperación, de consecuencias intolerables de la injusticia, tantas veces casi institucionalizada, y de la violencia que no da tregua. Asistimos a una especie de espiral de violencia contra la vida que engendra permanentemente más violencia, más muerte y más destrucción.

J. G: Todas las religiones y las filosofías proclaman la inviolabilidad de la vida. ¿Por qué no han sido escuchadas? ¿Qué hacer para que esta situación cambie?

Arzobispo: Una vez más la respuesta es simple: Hay que volver a Dios, hay que redescubrir que la vida no nos pertenece, sino que la hemos recibido para que la defendamos, la protejamos, la promovamos. Y esto no se logra sin un cambio radical en la educación desde –yo diría sin temor a equivocarme- el seno mismo de la madre. La violencia no es algo connatural al hombre sino que se aprende. El amor y el respeto por los demás, en cambio, sí es connatural al corazón humano pero, a veces desde el seno mismo del hogar en que se nace, se va asesinando esta predisposición para sustituirla por la agresividad, la injusticia y la violencia. El fenómeno de la violencia intrafamiliar que se ha agudizado en los últimos años es profundamente preocupante porque precisamente allí, en los hogares, se están incubando generaciones cada vez más violentas. El mundo moderno ha querido sustituir a la familia fundamentada en el matrimonio por cualquier clase de unión y esto está teniendo consecuencias nefastas: niños y jóvenes sin amor, al borde de la depresión y del abismo del sinsentido de la existencia, que van a ser incapaces de brindar amor.

En ese contexto, nosotros los que creemos en la fuerza del amor tenemos que comprometernos a ser testigos del amor. Desde hace muchos años la Iglesia viene proclamando la necesidad de construir juntos una “civilización del amor”, es decir, una civilización marcada por la justicia, la solidaridad, la corresponsabilidad, la fraternidad; fuerzas, las únicas, capaces de engendrar la paz. Y el cimiento de esa construcción es el profundo respeto a la vida. A toda vida. En todo momento de la vida. Desde el primer momento de su concepción hasta el término natural de la existencia.

La vida es el gran regalo que hemos recibido de Dios y Cristo vino a dárnosla en plenitud, gracias a Su muerte y a Su resurrección. Acojámosla como don y como tarea. Así cambiaremos esta sociedad de muerte por una sociedad de vida y podremos poner las bases firmes para la construcción de la paz que tanto anhelamos en Colombia.

* Periodista - Historiador. julioetica@yahoo.com

SAN JUAN MARÍA VIANNEY
Vida ejemplar en nuestros días

El 4 de agosto conmemoramos el aniversario 150 de la muerte de San Juan María Vianney, Patrono de nuestros sacerdotes y en nombre de quien fue decretado por nuestro Sumo Pontífice Benedicto XVI, desde el 19 de junio del presente año hasta el 19 de junio de 2010, el Año Sacerdotal. Como Iglesia Católica, es esencial que conozcamos los aspectos trascendentales de la vida del Santo Cura de Ars, de esta forma, entenderemos el por qué ha sido escogido como ejemplo de entrega absoluta en el orden del sacerdocio, modelo a seguir por todos aquellos que de igual manera han atendido el llamado para configurarse con Cristo. Los presbíteros de nuestra Arquidiócesis de Barranquilla y comunidades religiosas, deben tomar conciencia del papel trascendental que cumplen en la sociedad y buscar la mejor manera para salvar a tantos hombres que deambulan en el mundo sedientos de fe y amor hacia Dios.


Infancia
San Juan María Vianney, nació en Dardilly, Francia, el 8 de mayo de 1786.Durante su infancia, en la época de 1790, estalló la Revolución Francesa que persiguió incansablemente a la religión católica. Así que San Juan María y su familia, para poder asistir a misa tenían que hacerlo en celebraciones hechas a escondidas, donde los agentes del gobierno no se dieran cuenta, porqué había pena de muerte para los que se atrevieran a practicar en público su religión.La batalla contra la Iglesia católica la hacía el gobierno con el pretexto de implantar "Libertad, igualdad y fraternidad" y llevó a la guillotina a muchos hombres y mujeres, incluyendo a muchos sacerdotes y religiosas. Los sacerdotes tenían que disfrazarse, cambiando constantemente de domicilio, para poder ministrar al pueblo de Dios, que permanecía fiel. Entre estos sacerdotes se encuentran dos que serán muy importantes en la vocación de San Juan: el padre Balley y el padre Groboz.


Ardua formación Sacerdotal
Al subir al poder Napoleón Bonaparte, gradual-mente, la Iglesia obtuvo cierta libertad.Por corto tiempo M. Vianney asistió a una escuela de su pueblo, pero ahora que estaba creciendo, cada vez más los campos exigían de su trabajo. Fue en estas largas horas de faena en las que su convicción de ser sacerdote creció en su mente. Se decía: "Si soy sacerdote podría ganar muchas almas para Dios". El Arzobispo de Lyons, quien era tío de Napoleón, sabía que su primer deber era buscar candidatos para el sacerdocio y así cada parroquia fue instruida para que se iniciase una campaña para promover las vocaciones al sacerdocio. El padre Balley, párroco de Ecculy, abrió en la rectoría una pequeña escuela para formar aquellos jóvenes que sintiesen la vocación. Era la oportunidad para San Juan María Vianney, quien en ese entonces tenía 20 años.Muchos dicen que era torpe, pues tenía mala memoria. Él mismo decía: "Que no podía guardar nada en su mala cabeza". Al ver que le era tan difícil retener especialmente la gramática del Latín, en un momento de desesperación casi se regresa a su casa, pero felizmente el padre Balley captó el peligro en el que se hallaba su estudiante, y le pidió hiciese un peregrinaje al Santuario de San Francisco Regis, en Louvesc. El peregrinaje logró un cambio en él, lo suficiente para salvarlo del sentimiento de desaliento que casi logra apartarlo de sus estudios.El apetito de poder de Napoleón era insaciable. Se había lanzado a la conquista de Europa, lo que provocó que muchos muriesen en su ejército. La falta de soldados lo llevó a reclutar más aun, y en el 1806 la clase de Juan María fue llamada a enlistarse. En el otoño de 1809, Juan Vianney, a pesar de estar exento por ser seminarista, fue llamado para el ejército. El joven Vianney fue mandado a los regimientos de España.El 26 de octubre, San Juan María entró en las barracas de Lyons por enfermarse en medio de la lucha y luego de un tiempo dejó el hospital, pero se encontró con la noticia que su compañía se había marchado. El invierno era recio y una fiebre altísima lo atacó lo que provocó que muy pronto no pudiese seguir avanzando. En ese momento comenzó a rezar el Rosario. Dijo tiempo después que: "Quizás nunca lo recé con tanta confianza". De pronto un extraño se le presentó frente a él y le preguntó: "¿qué estás haciendo aquí?". Juan Bautista le contó lo que le había pasado y a partir de ese momento empezaron a caminar, llegaron a la casa de un labrador y allí estuvo por varios días hasta que se le pasó la fiebre. Mientras estaba en cama por primera vez pasó por su mente la realidad de que sin haber sido culpa suya, el era ahora un desertor. En ese entonces, Vianney adoptó el nombre de Jerome Vincent.En el 1810 un decreto imperial concedió amnistía a todos los desertores de los años 1806 a 1810 y M. Vianney regresó a casa para terminar sus estudios. En octubre 1813, entró en el Seminario Mayor de Lyons. Su inadecuado conocimiento del latín le hizo imposible captar lo que los profesores decían o responder a las preguntas que le eran hechas. Al final de su primer término le pidieron que se marchara, y su dolor y desaliento eran inmensos.Por algún tiempo pensó en irse a una de tantas congregaciones de hermanos religiosos; sin embargo, una vez más el sacerdote Balley vino en su rescate y sus estudios le fueron dados en privado en Ecculy, pero no pasó el examen previo a la ordenación. Un examen privado en la rectoría de Ecculy probó ser más satisfactorio y fue tomado como suficiente, siendo juzgadas justamente sus cualidades morales que sobrepasaban cualquier falta académica.En agosto 13 de 1815, Juan Bautista Vianney fue elevado al sacerdocio, a esa inefable dignidad de la que tan frecuentemente hablaba diciendo: "El Sacerdote solo será entendido en el cielo"; tenía 29 años de edad.


Párroco de Ars. 1818-1859
El pueblecito de Ars se encuentra en una planicie ondulada, que tiene en su centro una pequeña colina donde se encuentra el templo, sirviéndole de plataforma. En el 1815 consistía de unas 40 casas. Su parroquia estaba extremadamente dañada y de igual condición estaba la rectoría, que se encontraba a un lado del valle.En ese entonces, en Ars la desolación espiritual era aún mayor que la material. En los primeros días de febrero de 1818, que el Abbe Vianney recibió la notificación oficial de su traslado a Ars. El Vicario General le dijo: "No hay mucho amor en esa parroquia, tu le infundirás un poco". El 9 de febrero, M. Vianney se dirigió hacia el lugar que sería por los siguientes 41 años el lugar de su sorprendente y sin precedente actividad. Caminó 38 Km. desde Ecculy hasta Ars. Cuando pudo divisar la pequeña villa, hizo un comentario de su pequeñez y al mismo tiempo hizo una profecía: "La parroquia no será capaz de contener a las multitudes que vendrán hacia aquí". Los habitantes del pueblo en su mayoría buscaban los placeres del mundo y no tenían mucha fe, aunque quedaba un pequeño núcleo de personas que permanecían fervorosas.Al llegar, su primera preocupación era la de establecer contacto con su rebaño. Visitó cada casa de la parroquia y para ganar la amistad de los habitantes, les hablaba del estado de las cosechas, del tiempo, de sus familias, etc.respaldo de la comunidad, él oraba y añadía a la oración las más austeras penitencias. Hizo sus propios instrumentos de penitencia. Su cama era el piso, pasaba sin comer varios días. Hasta 1827 no había nadie que hiciese las labores domésticas en la rectoría. Él decía: "El demonio no le teme tanto a la disciplina y a las camisas de pelo; lo que realmente teme es a la reducción de comida, bebida y sueño".


Trabajo Pastoral
La secuela más desastrosa de la revolución era la ignorancia religiosa de las personas. El santo cura resolvió hacer todo lo posible para remediar el estado deplorable de los corazones. Sin embargo, sus sermones e instrucciones le costaban un dolor enorme: su memoria no le permitía retener, así que pasaba noches enteras en la pequeña sacristía, en la composición y memorización de sus sermones de domingo; en muchas ocasiones trabajaba 7 horas corridas en sus sermones. Un parroquiano le preguntó una vez, porqué cuando predicaba hablaba tan alto y cuando oraba tan bajo, y él le dijo: "Ah, cuando predico le hablo a personas que están aparentemente sordas o dormidas, pero en oración le hablo a Dios que no es sordo".Los niños le daban aún más lástima que los adultos y comenzó a agruparlos en la rectoría y luego en la parroquia.En esos días la profanación del domingo era común y los hombres pasaban la mañana trabajando en el campo y las tardes y noches en los bailes o en las tabernas. San Juan luchó en contra de estos males con gran vehemencia.


Consolidación de un pueblo con fe
Pasaron dos años cuando llegó la noticia de que San Juan Vianney sería el Cura de Salles, en Beaujolais. Todo el pueblo de Ars estaba consternado con la noticia. Para asegurar su futuro, el pueblo pidió que su villa fuese erigida en parroquia regular y que su párroco fuese el Cura de Ars. El padre Vianney fue puesto como párroco, ya que hasta ese momento solo había sido capellán. Ese mismo año el Santo Cura de Ars inició los trabajos en el templo. Se construyó una torre, y varias capillas laterales, entre ellas una dedicada a la Santísima Virgen, donde por 40 años todos los sábados diría Misa el santo cura.


Gran Confesor
La afluencia de peregrinos se inició en 1827. A partir del 1828 el Santo Cura no podía irse ni siquiera por un día. Permanecía 12 horas diarias en el confesionario durante el invierno y 16 durante el verano. Los feligreses acudían en gran proporción a confesarse con él, pues en su manera de lidiar con las almas, era infinitamente gentil y al mismo tiempo decía la verdad que el alma necesitaba escuchar para su bien. Sus exhortaciones eran breves y dirigidas al punto necesario. A muchos les leía los pecados en su pensamiento y les decía los pecados que se les habían quedado sin decir. En una ocasión cuando su competencia profesional fue puesta en duda por algunos de sus hermanos sacerdotes, el obispo de la Diócesis mandó a su Vicario General para que averiguase y diese un reporte sobre el asunto. El reporte recibido por el obispo fue más que favorable. Aquello sirvió para que quedase constancia de su vida. Se puede decir que el confesionario era su morada habitual.Quería tener buenas escuelas en el pueblo y para comenzar abrió una escuela gratis para niñas a la que llamó "Providencia". Desde 1827 recibió como internas solo a niñas destituidas.


El final de sus días
Pasaron 41 años desde el primer día en el que el Cura llegó al pueblo de Ars, fueron años de actividad indescriptible. Después de 1858 decía con frecuencia: "Ya nos vamos; debemos morir; y muy pronto".El mes de julio de 1859 fue extremadamente caluroso, los peregrinos se desmayaban en grandes cantidades, pero el santo permanecía en el confesionario. El viernes 29 de julio, fue el último en el que apareció en la parroquia. Esa mañana entró en el confesionario como a la 1:00 a.m, pero después de haberse desmayado en varias ocasiones, le pidieron que descansara. A las 11:00 dio catecismo por última vez. Una hora después de medianoche, aproxima-damente, pidió ayuda: "Es mi pobre fin, llamen a mi confesor". La enfermedad progresó rápidamente. En la tarde del 2 de agosto recibió los últimos sacramentos: "Qué bueno es Dios; cuando ya nosotros no podemos ir más hacia Él, Él viene a nosotros".En la noche del 3 de agosto llegó su Obispo. El santo lo reconoció pero no pudo decir palabra alguna. Hacia la medianoche el fin era inminente. A las 2:00 a.m. del sábado 4 de agosto de 1859, el Cura de Ars encomendó su alma a Dios. Su cuerpo permanece incorrupto en la iglesia de Ars.El 8 de enero de 1905, el Papa Pío X, beatificó al Cura de Ars; y en la fiesta de Pentecostés mayo 31 de 1925, en presencia de una gran multitud, el Papa Pío XI pronunció la solemne sentencia: "Nosotros declaramos a Juan María Bautista Vianney que sea santo y sea inscrito en el catálogo de los santos"

De Mujer a Mujer

La gratitud anida en el corazón de la discípula de Jesús
Por Jaynes Hernández Natera*

Darle gracias al Señor es tener buena memoria para recordar los beneficios recibidos por Él. Por eso, hoy les digo amigas: Demos gracias a nuestro Amado Señor, por la vida, por todo lo que hemos vivido y aún por lo que viviremos en esta peregrinación terrena. Al dar gracias se prolonga nuestra comunión con nuestro Padre generoso.

La gratitud es una virtud que nos hace felices
Al sentirnos orgullosas con lo que tenemos, somos menos susceptibles a la decepción, al lamento continuo de esperar ser feliz (si tuviera tal cosa o aquella…), a la frustración y la famosa depresión que agobia a tantas hermanas nuestras. La gratitud se convierte además en una medicina preventiva para contraer el mal de alzheimer, porque nuestras neuronas se ejercitarían a diario, teniendo buena memoria para recordar la bondad del amor de Dios y de encontrar nuevas causas, frases en agradecimiento con Dios, de esta forma, aprendemos a descubrir y disfrutar todo aquello gratuito que en abundancia recibimos. Una mujer agradecida, es una mujer nueva que despierta y alaba a Dios, se preocupa menos, evita las líneas prematuras en el rostro, danza su espíritu en cada Eucaristía porque sabe que Jesús está presente en la fracción del pan y del vino, es consciente que Jesús está con ella en todo momento.

Las mujeres agradecidas seguían a Jesús
Unas encontraron en Él, el perdón de sus pecados, otras la salud del cuerpo, la del alma; encontraron quien las mirara con amor, les restauró la dignidad de mujer, a unas las tocó con Su misericordia y les cambió la vida, les devolvió el hijo muerto, la resucitó como la hija de Jairo, otras, le derramaron fino perfume en sus pies y cabeza; las escuchaba, les hablaba, les enseñaba, les dio la libertad a las que estaban encarceladas en sus miedos. Por su gratitud, las mujeres de Galilea le acompañaron cuando sus discípulos huían (Mc 15,41); la gratitud de ellas era la respuesta al amor que Jesús les había entregado y predicado. Ellas en gratitud se convirtieron en sus discípulas, en apóstol como María Magdalena, le servían y ayudaban con Sus bienes; muchas mujeres llegaron al martirio, pero no renunciaron al cristianismo. Su gratitud es signo de fidelidad, amor, alegría, esperanza y felicidad (no se puede tener un corazón agradecido, decir gracias y estar triste).


¿Cuándo es tiempo para agradecer?
Anticipadamente: la mujer de esperanza firme y fe fortalecida, agradece y cree en el amor de Dios, aún sin recibir físicamente lo que pide. “Y todo lo que pidan con fe lo recibirán” (Mt 21,22).
Inmediatamente: al ser beneficiadas de tan grato amor en cada perdón, sacramento de la reconciliación, al recibir la comunión, por cada sacramento, por el nacimiento de todo niño o niña, por la vida, por cada sí al amor, por reconocer cuanto nos ama a diario, a través de otras personas.
Permanentemente: la discípula-misionera (consagrada, soltera, casada, viuda, separada o cabeza de familia) vive en constante gratitud, lo cual le impulsa a servir y amarle en sus hermanos, uniéndose a Cristo (1 Tes 5 ,18).

¿Cómo dar gracias a Dios?
Demos gracias a Dios en privado como Daniel (Dn 6, 11) que se ponía de rodillas tres veces al día para orar y alabar a Dios, aún en el peligro de ser acusado y perder la vida. Demos gracias a Dios en público: “Te daré gracias en la gran asamblea y te alabaré ante un pueblo numeroso”. La acción de gracias debe ir siempre unida a la oración, a la alabanza: (Sal 95: 2, 105:1,106:1,107:1,136:1-3). La alabanza debe preceder a la acción, a la disposición de seguirle, cualquiera sea la respuesta a la vocación con la cual le estemos respondiendo al “ven y sígueme” de Jesús.

¿Amiga quieres dar gracias a Dios?
¡Sabes! estamos en estado de misión, el 9 de julio de 2009 se lanzó para Colombia la Misión Continental; Monseñor Rubén Salazar Gómez, Presidente de la CEC, aseguró que se busca: “renovar los procesos de evangelización en nuestra patria, con un nuevo ardor”, para que todos los colombianos movidos por la gratitud a Dios, quien nos ama infinitamente y nos convoca a ir y evangelizar, nos esforcemos por acercar a los que se han distanciado de Dios y de la Iglesia, y se tenga un encuentro personalizado con Jesucristo Vivo, con una Identidad cristiana que consciente vaya al encuentro del prójimo y en una unidad de todos y con todos, ¡seamos misioneras en el anuncio de Cristo! No permitas que te pregunten : “¿dónde está tu gratitud?”

La mujer puede enamorar con el amor de Dios que Él mismo le ha dado, para ir al encuentro del más alejado de su amor, empezando por la familia, agradeciendo por ser amada, salvada, liberada, perdonada, bendecida, exaltada en su dignidad por Cristo. La mujer que quiere, es agente de la Misión Continental.

*Integrante de la Comisión de Pastoral Vocacional. jaynesher@hotmail.com

Iglesia tiene que ser más arriesgada en los medios: Padre “CHUCHO”.

Por Carlos Mario Caselles*


El padre Jesús Orjuela, más conocido como el padre Chucho visitó la Arquidiócesis de Barranquilla para realizar la transmisión de la Santa Misa desde la Catedral Metropolitana María Reina.

Durante la visita, el periódico Kairós conversó con el padre Chucho para conocer cual ha sido su trabajo pastoral desde los medios de comunicación.

Carlos Caselles: ¿A qué edad decide entrar al sacerdocio y por qué?

Padre Chucho: A los 15 años empecé mi formación en el seminario menor, muy joven, y lo decidí por lo que se dijo hoy en Barranquilla: Cristo es Importante. Tenemos que llevar siempre el amor de Cristo y eso es algo que no podemos perder nunca. Quien mira a Cristo, no le faltará la alegría en su ministerio sacerdotal.

C.S. :¿Cómo podría describir su manera de evangelizar a tantas personas, de tal forma que no sea visto como el personaje de la televisión, sino como un guía espiritual que lleva el mensaje de Dios?

P.CH.: Los personajes parecen ser muy importantes, eso dicen; pero para mi concepto son más importantes las personas y el ser humano. Me da mucho pesar con aquellos que piensan que se sigue a un sacerdote, porque lo que yo he querido mostrar con mi ejemplo, mis acciones, mi pensamiento, es mostrar a Cristo, a nadie más. Vamos por diferentes lugares, mostrando no un “Cura Chucho”, ese personaje no, sino mostrando la riqueza de nuestra Iglesia en cada lugar, cómo el Espíritu Santo está soplando en el corazón de todos y se está manifestando con todo su poder.

Sin embargo, fijémonos que la Iglesia tiene que ser más arriesgada en los medios de comunicación y a través de estos ir anunciando a Cristo. La gente a veces idealiza y tiene otros paradigmas que traen muerte. Como lo decía el Arzobispo de Barranquilla hoy: “Porqué no nos lanzamos con toda la fuerza que nos da el Señor para conquistar los corazones y que la gente aplauda, grite y cante, pero para Cristo”.


K: ¿Cuál es ese mensaje que trajo el “Padre Chucho” a la ciudad de Barranquilla?

P.CH: Jesucristo es el lote de nuestra heredad, esa es la casa por la que tenemos que luchar, esa es la herencia por la que tenemos que trabajar todos. Nuestra suerte está en las manos de Dios y el futuro es luz, alegría y paz. Que no olvide Barranquilla que si Jesucristo es el lote de nuestra heredad y Dios es nuestra herencia, este pueblo barranquillero es el sitio escogido como heredad y sobre el se derrama bendición.

* Comunicador Social y Periodista. cmariocaselles@hotmail.com

El Rincón de Pablito

Métete en el cuento
Guacamayas: encantadoras y ruidosas


El colorido, inteligencia y destreza para comunicarse, convierten a estas hermosas aves en una magnífica atracción que la madre naturaleza nos regala. Actualmente, por el afán de tenerlas como mascotas, esta familia de aves ha reducido el número de su población en el medio natural, colocándolas en la lista de animales en peligro de extinción. Amigos, juntos podemos evitar que estas especies desaparezcan del reino animal. ¡Conoce tres de las existentes!

Guacamaya pechiamarilla (Ara araruna)
Mide entre 71 y 90 cm. Tiene una coloración corporal inconfundible entre azul ultramarino y amarillo intenso. Su cara es blanca y con hermosas líneas negras. Esta ave habita en bosques tropicales de Suramérica. Es común verla en pareja y en grupos de más de 25 individuos. En época reproductiva, hace una puesta de 2 a 4 huevos, los incuba durante 28 días y cuida de los polluelos durante 15 días más. Cuando hacen nido, tanto el macho como la hembra, adquieren una coloración rojiza en la cara.

Guacamaya verde (Ara militaris)
Mide de 70 a 80 cm, y pesa unos 900 gramos. Es de un color verde muy vivo. Tiene plumas rojas en su frente, mientras que en su cola se mezclan las plumas rojas y azules. Esta ave puede llegar a vivir 60 años en libertad. Ponen de 2 a 3 huevos. Los polluelos están con los padres cerca de un año, y sus primeros vuelos se producen durante los primeros 100 días de edad. Se alimenta de frutos secos, bayas, frutas y verduras. Está clasificada como especie vulnerable por la alteración de su hábitat.

Guacamaya escarlata (Ara chloroptera)
Mide de 85 a 95 cm, y pesa aproximadamente 950 a 1 700 gramos, por consiguiente es considerada la guacamaya más fuerte y poderosa. Su hábitat son las zonas selváticas y los bosques húmedos, ubicados entre los 500 y 1500 metros de altitud. Se diferencia muy bien de la guacamaya bandera por la presencia de sólo plumas azules en sus alas, así como por las líneas rojas de su cara, que van desde el pico hasta la cabeza. No está catalogada como especie amenazada, pero podría estarlo rápidamente por la destrucción del hábitat donde se distribuye.