viernes, octubre 10, 2008

EDITORIAL

SIEMPRE HAY UNA RAZÓN PARA VIVIR EN COMUNIDAD
“Hagamos comunidad, somos hermanos”. Inspirándonos en este valor del mes de octubre que propone la Arquidiócesis de Barranquilla para todos los habitantes del Atlántico, damos una mirada a nuestro alrededor y seguimos descubriendo una Iglesia que cada día vive más el espíritu de la comunión y la participación; un pueblo que busca la verdad y el sentido de la vida en Cristo Jesús.

En el mes de octubre son muchas las ocasiones que se nos brinda para hacer comunidad. Celebraremos el ‘Mes del Santo Rosario’, hermosa oportunidad que la Iglesia nos regala para rezar en la intimidad de nuestra habitación, en familia, con los vecinos, en la parroquia o en la oficina, esta plegaria mariana que nos convoca en torno a la santísima Virgen María para vivir en comunidad teniendo como centro a Nuestro Señor Jesucristo.

Además, octubre es el mes de la ‘Jornada Mundial por las Misiones’, oportunidad para unirnos a todos aquellos misioneros que en lejanas tierras de este planeta están donando su vida por el anuncio del Reino de Dios, llevando a todos los hombres el mensaje de salvación para que se conviertan y crean en Jesucristo el Señor. Desde cada parroquia nos podemos unir con oración y con donaciones económicas para el sostenimiento de esta labor pastoral y evangelizadora de la Iglesia en el mundo. Todo esto hace comunidad.

Asimismo, octubre avanza en medio de un ambiente de pureza e inocencia pues es el mes de los niños, durante el cual juega toda la imaginación no sólo de los párvulos sino también de los adultos, ya que se nos viene a la mente nuestra propia infancia; es hacer presente un pasado feliz. Todo esto nos recrea y nos une en un solo corazón y en una sola comunidad.

En el ámbito arquidiocesano, octubre es un mes en el que todas las comisiones ya han entregado su planificación y su programación, trabajo desarrollado muy detenidamente en comunidad y como equipo para proyectar desde el hoy la Iglesia que queremos y el mundo necesita, es decir, una Iglesia comunión, participación y misión.

Y como si todo esto no bastara, cerraremos el mes con la inauguración de la nueva sede de nuestra Curia Arquidiocesana, es decir, ese espacio donde el Arzobispo con sus colaboradores directos en lo pastoral, lo administrativo y lo judicial, dirigen y coordinan toda la labor de la Arquidiócesis de Barranquilla. Para este importante momento nos estará acompañando el Nuncio Apostólico Aldo Cavalli, es decir, el representante de la Santa Sede en Colombia, quien viene a vivir con nosotros el gozo de todos los esfuerzos de la comunidad en la remodelación de este edificio.

Hay, pues, más de una razón para vivir en comunidad. Y la tuya, ¿cuál es?

No hay comentarios.: