lunes, junio 30, 2008

NUESTRA PORTADA


HABLEMOS DE LA CATEDRATÓN 2008
Este es el principal compromiso con el que iniciamos nuestra campaña: "multiplicar el mensaje de la Catedratón entre nuestras amistades, familiares, compañeros de trabajo y grupos que nos rodean".

EMISORA MINUTO DE DIOS LANZA CANAL DE TV
Internet es el medio de comunicación por el cual las personas podrán disfrutar de la nueva 'herramienta de evangelización'.

¿QUÉ DEBEN SABER LOS PROFESORES DE SUS ESTUDIANTES?
Aprovechando el período intersemestral de vacaciones, Kairós invita a los profesores a que se tomen un tiempo de reflexión sobre sus alumnos.

EDITORIAL


DESDE LA CATEDRATÓN
VIVIMOS LA SOLIDARIDAD

La Catedratón se ha convertido para los atlanticenses en una obra magnánima por medio de la cual se nos brinda la oportunidad de poner en práctica el espíritu de solidaridad que es propio del hombre costeño.

Es una hermosa ocasión para promover el bien común, es decir, poner al servicio de los más necesitados nuestra contribución económica para la edificación de nuevos templos desde donde podamos transmitir la palabra de Dios y vivir la experiencia del amor desde el compartir de nuestros bienes materiales, espirituales y culturales.

Como evento nació desde la humildad y la sencillez de un puñado de personas que pensaron en los hermanos que comparten una misma fe, un mismo amor que nos une en el corazón grande de Nuestro Señor Jesucristo; un grupo de personas que logró sensibilizar a otros más hasta llegar a los muchos que hoy han descubierto el verdadero sentido del servicio: "Hay más felicidad en dar que en recibir".

Hoy, la Catedratón se ha metido en el corazón no sólo de los atlanticenses, sino también de aquellos que en el territorio nacional o fuera de él ven a nuestra Arquidiócesis como una Iglesia de comunidades vivas y dinámicas que llevan a los bautizados a un encuentro y un compromiso real con Jesucristo. Es de gran satisfacción contemplar cantidades de niños, jóvenes y adultos, colonias nacionales y extranjeras residentes en Barranquilla, familias enteras, colocar en las alcancías de la Catedratón su contribución con amor y desprendimiento total. Es ahí donde se palpa al Dios que vive en el corazón de nuestro pueblo atlanticense.

Este año, sigamos siendo solidarios... 17 templos avanzados en su construcción nos demuestran que en el Atlántico sí podemos pensar en obras grandes de beneficio colectivo. La verdad es que la Catedratón nos une y nos hace uno en Cristo Jesús.

EMISORA MINUTO DE DIOS TRASCIENDE FRONTERAS


La Emisora Minuto de Dios siempre ha estado interesada en evangelizar a todas esas personas que creen firmemente en la Iglesia Católica y, también, a aquellas que aún no conocen a Dios. Es por esto que cualquier herramienta que se use o cualquier medio nuevo que se pueda explorar para comunicar el mensaje del Señor, se convierte en la oportunidad ideal que facilitaría cumplir ese objetivo pastoral.

Internet es una herramienta que, indudablemente, se ha convertido en el medio de comunicación masivo más importante y usado en los últimos años. Teniendo esto en cuenta, y lo llamativo que puede ser la televisión a muchas personas, esta emisora barranquillera, en cabeza del padre Alberto Linero Gómez, presenta su nuevo canal de televisión por Internet -web tv-.

Sin lugar a dudas los jóvenes, como población líder en el uso de la Internet, son aquellos que tendrán la oportunidad para conocer más a fondo y mantener una relación estrecha con la emisora de la manera en que más les agrada y, que en muchos casos, resulta ser más efectiva para la comprensión de los mensajes por este canal.

PROFESIONALES AL SERVICIO DE LA IGLESIA


El Secretariado Arquidiocesano de Pastoral Social de Barranquilla, con la evangelización de la doctrina social de la Iglesia Católica, construye una sociedad más justa, participativa y solidaria, privilegiando a los más pobres del Departamento del Atlántico. La misión de esta institución se logra con un grupo de profesionales que ofrecen sus conocimientos para el bien de los demás.

Es así como nos encontramos con personas como Danilo Gómez Iglesias, un administrador de empresas con especialización en Gerencia de Mercadeo y que actualmente desmpeña el cargo de subdirector del Secretariado de Pastoral Social. Él pone todo su empeño y experiencia de 5 años de trabajo con la empresa privada.

MARIA P. DÁVILA: LA MUJER QUE VIVE HABLANDO DE LA CATEDRATÓN


Dios la ha premiado con el don de la comunicación, pues expresa con destreza sus propias ideas y las que de manera creativa debe plasmar en campañas publicitarias de productos y servicios de los clientes que llegan a su agencia de publicidad y marketing seguros de encontrar en ella la asesoría integran que buscaban.

En estos cinco años de vida de la CATEDRATÓN, uno de los rostros que identifica este proceso es el de la comunicadora social María Patricia Dávila, quien propone hacer de esta campaña el tema de conversación de todos los atlanticenses.

En medio de su apretada agenda que se desarrolla entre reuniones con su equipo de colaboradores, asesoría directa a los clientes de su empresa, su apostolado como agente de pastoral en la parroquia Nuestra Señora de las Gracias de Torcoroma y una vida familiar que no descuida a pesar de tanto trabajo -que en estos días se incrementa por la CATEDRATÓN-, logramos entrevistar a esta católica que cada día se enamora más de Cristo a través de su Iglesia.

EN SECTORES ORGANIZADOS, ASAMBLEAS FAMILIARES EXITOSAS


Desde que se iniciaron las 'asambleas familiares' con el nuevo proceso de evangelización en la Arquidiócesis de Barranquilla, son muchas las experiencias que se viven, todos los martes, en los encuentros de vecinos alrededor del Evangelio. En esta oportunidad KAIRÓS quiso conocer la experiencia de la unidad pastoral Corazón Inmaculado de María.

La historia de las 'asambleas familiares' inicia al poco tiempo de posesionarse monseñor Rubén Salazar Gómez como Arzobispo de Barranquilla. Él, aprovechando la coyuntura del Jubileo del año 2000, declaró para nuestra Arquidiócesis un 'estado de misión permanente', insistiendo en la importancia de la familia en todo este proceso de nueva evangelización. Es entonces cuando el Arzobispo propone las asambleas familiares como espacio de encuentro fraterno entre varias familias de una misma cuadra o vecindario.

La propuesta concreta es que las personas compartan en sus hogares la Palabra de Dios y, luego, extiendan esta experiencia a las asambleas familiares que semanalmente se realizan en la cuadra o el sector donde viven. El texto de reflexión de estas reuniones es el evangelio del domingo siguiente para que, al llegar a la Eucaristía dominical, las familias tengan una mayor comprensión de su contenido, lo que contribuirá a hacer vida la Palabra de Dios.

MUJERES DE PALABRA


¡Hola mujeres! Cierto día me expresé delante de un amigo diciendo: "¡Soy una mujer de palabra!", él se sonrió y me dijo: "bien", pero dos jóvenes con quienes él estaba se sorprendieron porque ese término "es sólo para hombres", dijo uno, y el otro: "yo no confío ni en lo que traigo puesto", reímos todos. Me tocó hacer la defensa correspondiente y contribuir a la renovación de sus conceptos de honor y confianza, en la dignidad de la mujer en el plano laboral, económico y político, y especialmente en el hogar, donde la eficacia de su palabra contribuye al crecimiento integral de todos los que conviven con ella.

'Ser de palabra' es de todo hombre o mujer, y la Iglesia confía en la palabra de muchas mujeres capaces de llevar la buena nueva a sus hogares, a los lugares de trabajo y estudio. Jesús confió en las mujeres, se apareció primero a ellas al resucitar, las rescató y les dio su valor, prueba de ello es que ellas también estuvieron con Él en el momento de su crucifixión y muerte. Este valor de estar a su lado lo obtuvieron por estar a la escucha del Maestro, saciadas de su palabra de vida eterna y por ser mujeres. Creadas con amor y por amor en su corazón, estaban dispuestas a no callar la verdad y a vivir sus compromisos de discípulas-misioneras. Por eso las invito a escuchar y hacer silencio para no callar la verdad de la fe.

PARROQUIAS: AYER Y HOY DE LA FE


UNIDAD PASTORAL
SANTA MARIA DE LA ESPERANZA

SE FORTALECE LA FE
CON LA MISIÓN ARQUIDIOCESANA

Por JULIO GIRALDO

Con mucha razón, algunos conocedores de la historia eclesial de Barranquilla, afirman que con la llegada a nuestra Arquidiócesis de monseñor Rubén Salazar Gómez, la historia de esta porción del pueblo de Dios, a partir de ese momento, se dividió en antiguo y nuevo testamento. En lo antiguo, sólo existía una parroquia para atender un territorio con 50 mil o más habitantes. Hoy, vemos esos mismos territorios hasta con cuatro unidades pastorales y con muchas células pastorales. Lo anterior hizo que los sueños de miles de católicos se volvieran realidad al tener una parroquia en cada uno de sus sectores. Así ocurrió con los habitantes del barrio Los Trupillos, quienes pertenecían al sector 11 de la unidad pastoral Nuestra Señora de las Nieves y sus sueños, por mucho tiempo, fueron el que algún día pudieran tener un templo con sacerdote en propiedad para ejercer plenamente su vida espiritual.

Era una comunidad numerosa que, inicialmente, asistía a las eucaristías de su parroquia, pero con el tiempo se fueron organizando y lograron que los distintos párrocos de Las Nieves empezaran a celebrar la misa dominical en su sector, al lado de una cancha que pertenecía a una empresa de gaseosas; las celebraciones se hacían al aire libre y los feligreses debían llevar sombrillas ya fuera para el sol o para el agua. Uno de sus habitantes, por propia iniciativa, asumió el ministerio de "la gran sombrilla", pues era el que se encargaba de cargar en sus hombros, cada vez que amenazaba la lluvia, un enorme paraguas y lo instalaba en el sitio donde estaba el sacerdote para protegerlo y permitir que la celebración de la misa no se suspendiera.

EL RINCÓN DE PABLITO


NIÑOS Y NIÑAS CON LA VIRGEN DEL CARMEN

Con el propósito de que todos los niños seamos protagonistas activos de la celebración de la Virgen del Carmen y participemos en los espacios de espiritualidad que en ella se desarrollan, la Unidad Porteña de Aprendizaje -UPA- está organizando, una vez más, la jornada Niñas y Niños con la Virgen del Carmen. Otro de los objetivos importantes es que fomentemos una auténtica devoción por María, Madre de Dios, y nos integremos para pedir que nos proteja.

GUILLO EL MONAGUILLO

ORACIÓN DEL SEÑOR: PADRENUESTRO

El rito de comunión inicia con la Oración del Señor, ¿la conoces?

Repasémosla: "Padre nuestro que estás en el cielo..."

El Padrenuestro es la Oración del Señor. Él mismo nos la enseñó. Por ello, en la Eucaristía, no podía faltar esta bella oración de alabanza y súplica a nuestro Dios. En ella imploramos a Dios que nos regale el pan de cada día, principalmente el pan eucarístico, y pedimos por la purificación de los pecados.

El sacerdote hace una pequeña invitación y todos los que nos hemos reunido para la celebración de la Eucaristía, junto con el sacerdote, decimos el Padrenuestro.

En la misa no concluye la oración con el "Amén" pues, después de este, el sacerdote añade un embolismo, otra palabra un poco extraña. El embolismo quiere decir, una reiteración de la última petición, pedimos con mucha fuerza al Señor para que nos libre de todos los males.

viernes, junio 13, 2008

NUESTRA PORTADA


POR EL MEDIO AMBIENTE:
¡Es hora de hacer algo! Jueves 5 de junio, Día Mundial del Medio Ambiente.

ÓBOLO DE SAN PEDRO
Gran oportunidad para vivir la solidaridad.

SER PADRES AYER Y SER PADRES HOY
Existen cosas que, definitivamente, ningún libro nos lo enseñará. Una de ellas es vivir por nosotros mismos, o ser verdaderos padres según el modelo de Dios, aún cuando existan las llamadas 'escuelas de padres'.

EDITORIAL


"HAY MÁS ALEGRÍA EN DAR
QUE EN RECIBIR"

Nuevamente el calendario litúrgico nos presenta la ‘Solemnidad de San Pedro y San Pablo’, y en ella la faceta del Papa en un acontecimiento que nos permite sentir como propios los hechos mismos de la caridad del Santo Padre.

Ese gesto de hermandad con el Romano Pontífice nos permite despertar el valor de la solidaridad como lo enseñó san Pablo a la comunidad de los Corinto: “Pues ustedes, que sobresalen en todo: en fe, en facilidad de palabra, en conocimientos, en buena disposición para servir y en amor que aprendieron de nosotros, igualmente deben sobresalir en esta obra de caridad” (2 Cor. 8,7). Es decir, participar en las obras que nuestro Sumo Pontífice adelanta es, más que todo, asumir el ideal del buen cristiano para mostrar el rostro de Jesús a través de obras generosas que cambien profundamente la realidad triste que se vive en gran parte del mundo. Cuando Dios nos invita a “amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos”, precisamente nos llama a mantener un equilibrio en la vida de nuestra sociedad, demostrando todos los valores que se desprenden del amor y que son necesarios para mantener la paz, la solidaridad, el respeto y la igualdad.

Este mes de junio es, entonces, la oportunidad ideal –como debería ser siempre- para reflejar el amor de Dios a través de nosotros. Con el Óbolo de San Pedro nacen miles de oportunidades para aquellos que lo han perdido todo como consecuencia de un suceso lamentable o que, simplemente, no tienen las mismas oportunidades que las demás personas.

Contribuir con generosidad en los programas del Papa va a demostrar la perfecta sintonía que tienen los fieles de la Iglesia con la razón misma de ésta: llevar el mensaje de esperanza y vida que nos trajo y nos dejó Cristo. Pero todo esto es posible sólo si vemos más allá de los intereses personales para darle trascendencia a los que Dios ha dispuesto para todos nosotros y, de esta manera, reconfirmar lo que su Palabra nos dice: “Hay más alegría en dar que en recibir”.

UNA NUEVA FORMA DE PASTORAL, PARA UN NUEVO ESTILO DE VIDA


El mundo globalizado y en permanente cambio en el que vivimos, así como exige novedad y dinamismo en cuando a lenguajes, formas de comunicación, modelos educativos y proyectos de desarrollo, también extiende tal exigencia a la forma de hacer pastoral.

La acción pastoral de la Iglesia hoy se enfrenta a un sinnúmero de 'atracciones y distracciones' que se presentan, especialmente a través de los medios de comunicación social, como verdades que se asumen individual y colectivamente.

Con iluminadora precisión señalan nuestros obispos en la introducción del documento conclusivo de la reciente conferencia episcopal latinoamericana y caribeña: "Se abre paso un nuevo periodo de la historia con desafíos y exigencias, caracterizado por el desconcierto generalizado que se propaga por nuevas turbulencias sociales y políticas, por la difusión de una cultura lejana y hostil a la tradición cristiana, por la emergencia de variadas ofertas religiosas, que tratan de responder, a su manera, a la sed de Dios que manifiestan nuestros pueblos" (Cf. Documento de Aparecida No. 10).

SER PADRES AYER Y SER PADRES HOY


Existen cosas que, definitivamente, ningún libro nos lo enseñará. Una de ellas es vivir por nosotros mismos, o ser verdaderos padres según el modelo de Dios, aún cuando existan las llamadas 'escuelas para padres'. Hay algo, sin embargo, que seguro nos dará la posibilidad de adquirir la sabiduría necesaria necesaria para enfrentar ambas cosas: los años. Lo extraño de todo esto es que vivir la vida se aprende sólo viviéndola (parece perogrullada, pero tiene su lógica).

Aún así, los adultos de hoy descubrimos que existen modelos o esquemas de educación que difieren profundamente de la forma como fuimos levantados por nuestros padres. En el afán de la modernidad o de vivir modelos más acordes a los tiempos en que estamos, encontramos los llamados 'padres modernos', 'amigos' de sus hijos que pierden el horizonte de la responsabilidad y se les escapa de las manos la educación de sus hijos.

2008-2009: AÑO PAULINO


*Claudio Martín Blanco Malabet Pbro.

Con motivo del bimilenario del nacimiento de Pablo de Tarso, el Papa Benedicto XI abrirá, este 30 de junio, el 'Año Paulino' y que finalizará el 29 de junio del 2009 probablemente con una solemnidad mayor con la que se le dará apertura.

En su formación académica y teológica, Benedicto XVI ha querido resaltar la figura, vida y obra de San Pablo como una oportunidad para invitar a una reflexión profunda sobre la teología paulina de la gracia y el amor de Cristo, su misión a todas las gentes y mostrarlo como modelo de seguimiento en la vida cristiana.

La Iglesia, como depositaria de la fe, madre y maestra, luz de las gentes, gozo y esperanza, tiene una sólida fuente de formación e ilustración para el mundo actual presentando a Pablo como un modelo a seguir. La preparación para este año es detallada, cubre todas las expectativas que un hombre de fe puede tener, resolverá muchos interrogantes para los inquietos que quieren encontrar en los oportunismos seudo religiosos la solución a los problemas de nuestro tiempo y será sin duda, un interrogante para los que no quieren aceptar la persona adorable de Jesús.

No soy un teólogo, por lo tanto no voy a exponer los alcances de la teología paulina. Pretendo desde aquí y con este primer artículo, acompañar a mis amables lectores, durante este año paulino con una serie de artículos que quieren poner al día los pocos o muchos conocimientos que se tienen de San Pablo.

En la liturgia diaria y en la liturgia dominical, tanto de la Horas Litúrgicas, como de la Eucaristía, la presencia de Pablo es continua. Hacemos referencia, aunque no sea crítica o textual, a sus cartas, a su pensamiento, a su vida, pero es probable que no tengamos claridad suficiente sobre su obra y su alcance tanto en su tiempo, como a través de la historia del cristianismo.

Primero quiero ambientarlos sobre lo que será el año Paulino.
En la Basílica Papal de San Pablo Fuera de los Muros, el Santo Padre inaugurará el inicio del año Paulino. Se abre con una presentación del MESSIA de Haendel dirigida por Lorin Maazel y después el Santo Padre intervendrá con su discurso de apertura.

¿Cómo se originó este “año Paulino”? En el año 2006 el Papa tuvo cuatro catequesis seguidas sobre San Pablo. Después de haber hablado de los diferentes apóstoles y de otras figuras del cristianismo primitivo, el Santo Padre inicia, en la Audiencia General del 25 de octubre de 2006, una catequesis en la cual empieza a delinear el perfil de Pablo como persona escogida por Dios para su obra. En la Catequesis del 8 de noviembre del mismo año, el tema es la centralidad de Cristo en San Pablo; continúa el 15 de noviembre con el tema: “El Espíritu en San Pablo”, y termina el 22 de noviembre con el tema: “Pablo, su vida en la Iglesia”.

Estas cuatro catequesis van creando en la mente de Benedicto XVI el preámbulo de una idea que tiene íntima relación con su preocupación por el ecumenismo: Pablo es la figura ecuménica por excelencia. Y es probable que empezara a pensar seriamente en aprovechar el bimilenario de su nacimiento (fechas probables) para conjugar no sólo una catequesis mucho más amplia y profunda sobre Pablo, sino su lanzamiento como el apóstol de la gentes de todos los tiempos.

En las primeras vísperas de la Fiesta de San Pedro y San Pablo de 29 de junio de 2007, celebradas en la Basílica de San Pablo Fuera de los Muros, el Papa hace su primer anuncio de este año Paulino. Textualmente dice: “En estas primeras Vísperas de la solemnidad de San Pedro y San Pablo recordamos con gratitud a estos dos Apóstoles, cuya sangre, junto con la de tantos otros testigos del Evangelio, ha fecundado la Iglesia de Roma. San Pablo tiene conciencia de que es "apóstol por vocación", es decir, no por auto-candidatura ni por encargo humano, sino solamente por llamada y elección divina. En su epistolario, el Apóstol de los gentiles repite muchas veces que todo en su vida es fruto de la iniciativa gratuita y misericordiosa de Dios (cf. 1 Co 15, 9-10; 2 Co 4, 1; Ga 1, 15). Fue escogido "para anunciar el Evangelio de Dios" (Rm 1, 1), para propagar el anuncio de la gracia divina que reconcilia en Cristo al hombre con Dios, consigo mismo y con los demás”.

Queridos hermanos y hermanas, como en los inicios, también hoy Cristo necesita apóstoles dispuestos a sacrificarse. Necesita testigos y mártires como san Pablo: un tiempo perseguidor violento de los cristianos, cuando en el camino de Damasco cayó en tierra, cegado por la luz divina, se pasó sin vacilaciones al Crucificado y lo siguió sin volverse atrás. Vivió y trabajó por Cristo; por él sufrió y murió. ¡Qué actual es su ejemplo!

Precisamente por eso, me alegra anunciar oficialmente que al apóstol san Pablo dedicaremos un año jubilar especial, del 28 de junio de 2008 al 29 de junio de 2009, con ocasión del bimilenario de su nacimiento, que los historiadores sitúan entre los años 7 y 10 d.C. Este "Año paulino" podrá celebrarse de modo privilegiado en Roma, donde desde hace veinte siglos se conserva bajo el altar papal de esta basílica el sarcófago que, según el parecer concorde de los expertos y según una incontrovertible tradición, conserva los restos del apóstol san Pablo. Por consiguiente, en la basílica papal y en la homónima abadía benedictina contigua podrán tener lugar una serie de acontecimientos litúrgicos, culturales y ecuménicos, así como varias iniciativas pastorales y sociales, todas inspiradas en la espiritualidad paulina”.

Son dos las ideas que el Papa tiene o propone sobre este año paulino:
1. “Intensificar los esfuerzos ecuménicos y profundizar el conocimiento de la vida y del pensamiento del Apóstol” ,
2. “Que este conocimiento pueda ser un catalizador en grado de suscitar la reflexión sobre la historia de Europa y dé un impulso a los europeos para descubrir el inestimable tesoro de valores que han heredado de la sabiduría integral de la cultura helenística del Evangelio”.

El 'Año Paulino' tiene un sitio web cuya dirección es la siguiente: www.annopaolino.org y tiene un correo informativo al cual se puede escribir en cualquier idioma para pedir información sobre el mismo: info@annopaolino.org.

En próximos artículos haré un recorrido por la programación del Año Paolino y otros aspectos del mismo.

* Párroco de Unidad Pastoral Tres Ave Marías.

EL ÓBOLO DE SAN PEDRO: GRAN OPORTUNIDAD PARA VIVIR LA SOLIDARIDAD


"El Óbolo de San Pedro es la expresión más típica de la participación de todos los fieles en las iniciativas del Obispo de Roma en beneficio de la Iglesia universal. Es un gesto que no sólo tiene valor práctico, sino también una gran fuerza simbólica, como signo de comunión con el Papa y de solicitud por las necesidades de los hermanos; y por eso vuestro servicio posee un valor muy eclesial".

Estas fueron las palabras del Santo Padre Benedicto XVI durante un discurso a los socios del Círculo de San Pedro en febrero del año 2006. Con éstas, nuestro Sumo Pontífice, quiso subrayar el gran valor que tiene esta jornada de solidaridad que lidera la Iglesia católica en todo el mundo, todos los años.

Pero, ¿qué es el Óbolo de San Pedro?
A muchas personas les puede resultar este término desconocido o, en algunos de los casos, confuso. Para muchos es la primera vez que lo escuchan, pero es realmente importante saber su significado y su trascendencia en la comunidad mundial.

La palabra “óbolo”, según el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, significa pequeña cantidad con la que se contribuye para un fin determinado; en el caso particular de la Iglesia católica se comprende como la contribución económica de los fieles, de todo el mundo, para el sostenimiento de la Santa Sede. La Campaña del Óbolo de San Pedro está destinada a recolectar las ofrendas de los pastores y fieles, con el fin de proveer el fondo de la “Caridad del Papa”. Esta solidaridad de todos los católicos sirve como instrumento eficaz para despertar en nosotros un vínculo más estrecho con el Sumo Pontífice. Además, con esta actividad, se sigue la voluntad de Jesucristo cuando, en el Evangelio, llama a la fidelidad en su fe, a la adhesión a su magisterio pontificio, al amor, servicio y entrega a la Iglesia y, como consecuencia, a la generosidad en la ofrenda.

El Óbolo en los tiempos de Cristo
Para desarrollar su misión de salvación, Cristo, se dignó tener la necesidad del óbolo de aquellas personas que comprendían la misión que Dios le había encomendado en la tierra. Esta ‘campaña’ permitió a Jesús, a sus apóstoles y discípulos atender al apostolado, libres de obligaciones de trabajo y de preocupaciones económicas. En este sentido vemos cómo Jesús vivió totalmente pobre hasta el punto de tener que depender de la caridad de los demás.

Y, ¿por qué se sigue haciendo en estos tiempos el óbolo? Si bien es cierto, la Iglesia continúa la obra de Jesucristo en la tierra, es decir, su Encarnación y Redención. Pero, como todos debemos saber, esta institución cristiana tiene su componente divino y humano, por lo tanto el elemento humano asume unas exigencias como tal. Es ahí cuando los miembros de la Iglesia –que somos el alma y el cuerpo de ésta- asumimos el sostenimiento de esta misión que continúa el Papa, al igual que Jesucristo, los obispos como en el caso de los apóstoles, y el clero, como un día los discípulos: alimentan al espíritu con el pan de los ángeles y el cuerpo con el pan de los hombres. Todo esto en relación con el sentimiento mismo de que “el Papa es el padre y el maestro de todos los cristianos”, por lo cual todos los hijos de la Iglesia debemos experimentar la necesidad y el orgullo de proporcionarle los medios materiales para el ejercicio de su paternidad ilimitada.

La caridad del Papa apoyada por las ofrendas
Al transcurrir los años de la Campaña del Óbolo de San Pedro son muchos los acontecimientos trágicos que se han convertido en los principales destinatarios de las enormes sumas de dinero que el Papa distribuye, con el fin de aliviar las miserias de todo género en el planeta. Debido a tales circunstancias esta gran campaña mundial de generosidad y solidaridad ha adquirido el carácter de instrumento principal para alimentar el fondo de la “Caridad del Papa”.

En una comprensión más clara de esta gran jornada de generosidad mundial, podemos encontrar que la cantidad de ofrendas –cualquiera que sea- que dan los católicos al Santo Padre, sirve para ayudarle a ser frente a los gastos públicos de aquellos que no se pueden proveer con sus recursos ordinarios. Se establece así el carácter voluntario del “don” y se designa al Papa para administrar esos recursos que dona el Pueblo de Dios.

Precisamente los donativos entregados por los fieles de todo el mundo son empleados por el Papa para las obras misioneras, iniciativas humanitarias y de promoción social; de la misma manera, en sostenimiento de las actividades del Vaticano. Estas son actividades propias de la Iglesia ya que es la preocupación del Santo Padre, como pastor de ésta, tender la mano a diócesis pobres, institutos religiosos y fieles en dificultad, de los que se entienden pobres, niños, ancianos, marginados, emigrantes, víctimas de guerra y desastres naturales.

En ese orden de ideas el Óbolo es una demostración clara y sólida de la formación cristiana de los fieles de cada parroquia. Es fruto de la labor apostólica y de la predicación de los pastores de la Iglesia. Es la manifestación del dinamismo y la generosidad de cada comunidad eclesial a través de los fieles, de los pastores y de la colaboración de los medios de comunicación.

DATOS IMPORTANTES DEL ÓBOLO DE SAN PEDRO

Para este año la Campaña se desarrollará con la solemnidad de los Santos Apóstoles San Pedro y San Pablo. La programación que se seguirá en todas las parroquias del país es la siguiente:

* Domingos de junio: Motivación de la Colecta.
* Domingo 29 de junio: Solemnidad de San Pedro y San Pablo.
* Domingo 6 de julio: Se recibirá la colecta por razón del Festivo del puente Emiliani.

En 2007, el Papa Benedicto XVI entregó la suma de 3.5 millones de dólares en donaciones humanitarias para casos de emergencias y catástrofes; fondos todos procedentes del Óbolo de San Pedro.

El 15 de agoto de 2007 se entregaron, de estos mismos recursos, 200 mil dólares para la región de Ica, Perú, para ayudar a las personas que perdieron a sus familiares y sus pertencias.
También, el Santo Padre envió fondos para los damnificados por las inundaciones de los últimos meses en Colombia.

En su viaje Apostólico a Brasil, el Papa donó 300 mil dólares para las jurisdicciones misioneras de la Amazonía y 200 mil dólares para la “Hacienda la Esperanza”, centro católico de recuperación de jóvenes drogadictos.

Desde 1860 el óbolo ha constituido el principal ingreso del Papa.

100 AÑOS DE LA CONFERENCIA EPISCOPAL DE COLOMBIA


AL LADO DE LOS MÁS DÉBILES

Continuamos con la segunda parte de la reflexión histórica sobre el acompañamiento que a los más necesitados ha hecho la Conferencia Episcopal de Colombia a lo largo de estos 100 años.

Por JAVIER DARÍO RESTREPO*

LA PROPIEDAD
Se lee en la pastoral de 1940: “La propiedad privada individual es, para el hombre, de derecho natural, pero del hecho de que sea legítima no se puede concluir que le sea permitido al propietario encerrarse en el goce egoísta de sus bienes; la propiedad tiene una función social.”

En 1958, la Conferencia Episcopal de Colombia reiteró su defensa de la propiedad privada y de su carácter social: “tiene que ser usada en forma tal que de ella se beneficie la sociedad entera.” Los obispos comentaron las tensiones que hicieron crisis a comienzos de 1971, atribuyéndolas al desempleo masivo y a los problemas de subdesarrollo, marginalidad y dependencia y a la “actual distribución del ingreso y de la propiedad.”

En una declaración conocida el cinco de marzo de ese año, afirmaron con énfasis que sólo hay verdadera democracia económica cuando su estructura “hace posible en la práctica el acceso de todos a la propiedad.”

LOS SINDICATOS
Los sindicatos, que siempre fueron la piedra en el zapato de los empresarios, los gobiernos y los medios de comunicación, recibieron sin embargo el estímulo de las conferencias episcopales. Ya en 1940, en una extensa pastoral del 17 de abril, escribieron los obispos: “debe haber sindicatos de trabajadores y obreros, pero también los debe haber de patronos.” Para los obispos era tan inicuo el obrero solo e indefenso como el patrono aislado.

Esa curiosa propuesta desapareció en la pastoral del 11 de febrero de 1955 en que insistieron “el derecho de los trabajadores a organizarse y defender sus intereses.” Pero en esta ocasión apareció un elemento nuevo. Al condenar la Confederación Nacional de Trabajadores, CNT, que “había reaccionado contra el influjo de la Iglesia en los sindicatos” los obispos sentenciaron: “tanto en el orden social, como en el económico, están sometidos a nuestro supremo juicio, pues Dios nos confió el depósito de la verdad.”

En una nueva pastoral, el 19 de febrero de 1958, agregaron: “que los sindicatos en que toman parte los católicos sean integrados por católicos.” Fue un confesionalismo sindical explicable dentro de la lucha anticomunista que por esos años inspiró la creación de la UTC.

Esa cruzada contra el comunismo y contra todo lo que se le pareciera, tuvo una gran semejanza con la que, en su momento, sostuvo el episcopado contra el liberalismo: “el socialismo, fuente envenenada de donde brota el comunismo”, escribieron el 11 de febrero de 1955. Citando al Papa León XIII señalaron al socialismo como “incompatible con el catolicismo.” Y al Frente Democrático de Liberación Nacional que entonces daba sus primeros pasos, como una artimaña “para atraer al socialismo a los trabajadores, para incorporarlos después al comunismo.” Con la misma severidad condenaron en el mismo documento “el moderno sistema llamado justicialismo, “contrario a las enseñanzas de la Iglesia… la justicia social que el justicialismo quiere implantar, no es la del evangelio sino la que sirve para ensalzar a un hombre y afirmarlo en el poder.”

LA LUCHA DE LAS IDEAS
La cuestión social adquirió, con los años, nuevas formas para las que el episcopado aportó sus propias respuestas.

A mediados de la década de los 60 y comienzos de los 70, la agenda de la conferencia fue ocupada por una diversidad agobiante de hechos y de temas, todos urgentes: había terminado el Concilio Vaticano II y la Iglesia se disponía a incorporar a su vida todo su aire de renovación; en Colombia se agregó por esos años el impacto del discurso y de la acción del sacerdote Camilo Torres al ingresar a la guerrilla; la encíclica Populorum Progressio, tomada como plataforma ideológica, impulsó al grupo sacerdotal de Golconda, en un movimiento de rebelión que buscaba una respuesta a los deberes sociales de la Iglesia; simultáneamente aparecieron los primeros enunciados de la Teología de la Liberación en el continente y se reunió en Medellín la Conferencia latinoamericana de obispos. Instalada por el Papa Pablo VI, al final del Congreso Eucarístico Internacional celebrado en Bogotá.

Fue un período de agitación en el que la Conferencia mantuvo el talante reflexivo y orientador que mostró en documentos como el de su XXXII Asamblea Plenaria de 1976 en el que denunció el “contexto radicalizado” de grupos de sacerdotes y de laicos que “propagan doctrinas erróneas” y “llegan al extremo de desfigurar esencialmente la persona de Cristo”, y “crean un tipo inaceptable de pastoral evangelizadora social, con prescindencia de la jerarquía.”

En el mismo documento condenó la “síntesis entre cristianismo y marxismo”. Fue una extensa pastoral dedicada a la defensa de la doctrina social de la Iglesia y a rechazar sus desviaciones. Allí conminó a los sacerdotes que “se comprometen en su trabajo evangélico con los pobres”, a “reflexionar y revisar su posición,” en el caso de los que “difunden las ideas que hemos denunciado como erróneas.” Había aparecido la Teología de la Liberación.

COLOMBIA ES DIFERENTE
Cuando en 1958 la Conferencia anotó que “el capitalismo contemplado por los Sumos Pontífices no existe en Colombia con los mismos caracteres,” trazó una línea que singulariza al episcopado colombiano a través del tiempo. En esa pastoral admitieron los obispos que “sería injusto y, además nocivo, aplicar a nuestras industrias colombianas las requisitorias “que los Papas han hecho contra el capitalismo voraz y opresor.”

Diez años después y como comentario a los documentos previos a la Conferencia Episcopal de Medellín, los obispos colombianos presentaron a los demás episcopados del continente, su propia posición frente a una descripción que juzgaron pesimista y apocalíptica, porque se concentraba en los puntos negativos de la situación social de América Latina, y no dejaba espacio para la esperanza. Esa descripción, agregaron, llevaba a conclusiones precipitadas al cargar las culpas sobre los empresarios latinoamericanos y olvidaba las responsabilidades del comercio internacional. “Es una imagen unilateral de nuestra realidad,” apuntaron al reclamar, como omisiones del documento en estudio, la caridad, que es “un factor esencial en la tarea social;” las condiciones de convivencia creadas por la Iglesia en casi todos los países,” y los factores de unidad que la Iglesia ha impulsado, que si no hubiesen existido o desaparecieran “no podemos imaginar lo que sería el grado de disolución continental.” Como en 1958, la de Colombia era una Conferencia con una mirada diferente.…

APRENDIENDO DE LA GUERRA
El conflicto social y político que ha desangrado a Colombia durante los últimos 45 años, le permitió a la Iglesia evaluar y transformar su tarea evangelizadora. La prolongada guerra interna, el ejercicio pastoral en contacto con las más variadas y atroces formas de violencia, la necesidad de aportar soluciones concretas, revelaron la persistencia de la injusticia social, como una de las raíces de la guerra.

En la carta colectiva de 1994, Pastoral para la Paz, el episcopado compartió su visión del conflicto con un país que se familiarizaba, a pesar suyo, con el estruendo de las armas: Pacificar no es hacer la guerra y ganarla, sino eliminar sus causas, hacer la paz implica hacer desarrollo social; el ideal es una sociedad más justa, pero para llegar a ella se necesita una salida negociada del conflicto. Lo dijeron así en cartas pastorales, en ruedas de prensa, en predicaciones y escritos.

En ese nuevo lenguaje, la catástrofe social no se explicaba con la fórmula tradicional del abandono de los valores cristianos o de los mandamientos de la ley de Dios, o del olvido del temor de Dios. Del lenguaje abstracto de antes, el discurso episcopal pasó a lo concreto: ayudar a construir un nuevo concepto de Estado, crear una voluntad de respaldo a la paz, apoyar el crecimiento de una democracia de participación. Las virtudes tradicionales en el lenguaje episcopal aparecían como fondo de nuevas expresiones: solidaridad, tolerancia, responsabilidad social, imparcialidad en el servicio de la cosa pública, tutela de los derechos humanos, transparencia y veracidad.

Observa el historiador Ricardo Arias: “es una Iglesia que dejó atrás sus intereses particulares, sus temores frente al materialismo ateo y entendió que sin cambios profundos los problemas de la sociedad colombiana no tendrán solución.”

De esos cambios venían hablando los obispos desde decenios: reforma agraria, reforma urbana, reforma de las empresas, deberes sociales de la propiedad, y sobre ellos vuelve a hablar, incansable y terca como los profetas y, como ellos, con un lenguaje cada vez más fuerte y concreto, como el que el país le reconoce en los días que corren.

*Autor invitado – Periodista, escritor y maestro de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano – comunicacionespec@yahoo.com – comunicacionsocial@cec.org.co

PARROQUIAS: AYER Y HOY DE LA FE


UNIDAD PASTORAL NUESTRA SEÑORA DE LA LUZ
EL ESFUERZO DE UNA COMUNIDAD
POR MANTENER LA FE

Hace aproximadamente 190 años, cuando Barranquilla era una pequeña aldea, surge su primer barrio casi a orillas del Río Magdalena; sus habitantes vivían de la pesca, la agricultura y fabricaban las famosas esteras de enea que eran los colchones predilectos para dormir cómodos y frescos en un clima tan caliente. La primera casa que aparece en el naciente barrio la ubican en la carrera 23 con calle 11, es una familia de apellido Mendoza, un hogar muy numeroso que muy pronto se fue desintegrando y cada miembro hizo su propio rancho. Luego llega a lo que hoy es la calle 9, una señora que se llamaba Santos, acompañada de varios hermanos, quedó admirada de los frescos y abundantes pastizales que crecían en el sector, y recordó a una familia muy amiga suya de apellido Jiménez que vivía en Soledad y que criaban vacas, cerdos y caballos, por lo cual la señora Santos invitó a esta familia para que aprovechara este beneficio de la naturaleza. En efecto, a la citada familia le sonó la idea y de inmediato se trasladaron con sus animales y construyeron viviendas y corrales en lo que hoy es el bolsillo de la calle 18.

Comienza entonces a poblarse el primer barrio de Barranquilla en terrenos llenos de montes y barro, sin vías de penetración, sin acueducto ni agua potable, pues el precioso líquido lo tomaban del río Magdalena; tampoco contaban con energía eléctrica, para suplir esta necesidad de noche la gente alumbraba sus ranchos con mechones y pequeñas lámparas alimentadas con petróleo. Más adelante, el terminal marítimo decide construir algunas casas para ser entregadas a sus trabajadores y esto hace que el barrio comience a progresar un poco más; aún no tiene nombre, y unos vecinos deciden bautizarlo como el barrio "La Luz". Este nombre surgió de una leyenda en el sector: de noche, de buenas a primeras, todo el barrio se iluminaba, la gente asustada, por el fenómeno, relacionaban esto con espantos o con la presencia de espíritus malignos, pero otros, más sensatos, descubrieron que todo se originaba por la quema de los residuos de paja de enea con la cual fabricaban las esteras.

CÍRCULOS VOCACIONALES EN RETIRO KERIGMATICO


Varios jóvenes de los distintos círculos vocacionales vivieron el sábado 31 de mayo en la unidad pastoral San Carlos Borromeo, el anuncio de Jesucristo y los efectos de su presencia en medio de cada uno de nosotros. Este Retiro Kerigmático fue organizado por la Comisión de Pastoral Vocacional, que es dirigida por el padre Alexi Mattos, y la orientación estuvo a cargo de la Comisión de Pastoral Catequética.

Estos muchachos, quienes aspiran entrar al seminario y servir al Señor por medio del sacerdocio, aprendieron sobre el Kerigma, como aquel grito de victoria o el anuncio por primera vez de un Cristo salvador. Esta fue la oportunidad para conocer el amor de Dios, la fe, la conversión, el reconocimiento del pecado, el poder del Espíritu Santo, entre otros elementos necesarios que hacen posible tener un encuentro con el Altísimo.

Al final de la jornada, muchos sintieron vivo ese llamado que el Todopoderoso les ha hecho en este proceso de discernimiento vocacional. Estas son algunas reflexiones de lo vivido:

Amaury García
Vicaría Espíritu Santo
Parroquia San Juan Bautista Precursor
"La experiencia del retiro ha sido un apoyo para discernir lo que Dios quiere para nosotros, además es un compartir con los que están en la misma búsqueda y en el mismo camino".

Deivis Cueto
Vicaría Cristo Redentor
Célula Pastoral La Santa Cruz
"Este es mi segundo retiro Kerigmático, y con este he sentido más motivación, ganas de seguir, presto a escuchar lo que me dice el Señor. Es algo impresionante y maravilloso".

Luis Guillermo García
Vicaría María Reina
Parroquia San Carlos Borromeo
"Con este retiro me di cuenta que si no estamos tomados de la mano de Dios, nuestra vida estaría en constante pecado. Debemos discernir lo bueno y lo malo que se presenta, para así anunciar la gracia de Dios".

EL RINCÓN DE PABLITO

RITO DE LA COMUNIÓN
Terminada la Plegaria Eucarística continúa el Rito de la Comunión. La celebración de la Eucaristía es una gran fiesta, para los católicos un gran banquete Pascual, y como en toda buena fiesta no puede faltar la comida, comida que en este caso es la mejor, es Jesús mismo quien se nos da con su Cuerpo y con su Sangre.

Hay un canto muy lindo que dice: "Para crecer y vivir cada día tendré que alimentarme. En la mesa nos das la comida mejor, el Pan de la vida y el amor". ¡Y es cierto amiguitos!, hay muchos platos deliciosos preparados por nuestras madres, pero este es riquísimo, ¿ya lo has probado? ¡Cristo es la mejor comida!

Cada una de las partes del rito de comunión nos lleva a disfrutar del gran banquete. En la próxima comenzaré a hablarles de cada uno de los momentos del rito de la comunión. ¡Chao!

martes, junio 03, 2008

NUESTRA PORTADA


LA FAMILIA CRISTIANA HA DE SER UNA AUTÉNTICA COMUNIDAD
"La primera tarea de la familia es aquella de comprometerse constantemente en hacer de sí misma una auténtica comunidad de personas..."

SOLEMNIDAD DEL CORPUS CHRISTI
El sentido de la Eucaristía para los creyentes

AFICHE CON EL VALOR DEL MES
En el mes de junio todos estamos invitados a contribuir al desarrollo de nuestras comunidades y a brindar oportunidades que ayuden a una prosperidad integral.

EDITORIAL

LA FAMILIA: EL TESORO MÁS IMPORTANTE DE NUESTROS PUEBLOS

El Documento de Aparecida en su numeral 432, señala: "La familia es uno de los tesoros más importantes de los pueblos latinoamericanos y caribeños, y es patrimonio de la humanidad entera..."

Pero, en una sociedad cada día más fragmentada, donde lo que importa es el tener y no el ser; en una sociedad incrédula y relativista que pareciera no ocuparse de la búsqueda de 'soluciones efectivas' para evitar los flagelos primarios de la humanidad como la pobreza, el hambre, la violencia, la contaminación del medio ambiente...; en una sociedad donde la aplicación de los valores y los principios cristianos está en crisis, porque va en contravía a la propuesta de consumo que busca doblegar la voluntad del hombre y manejarla a su antojo desde una óptica mercantilista; en una sociedad donde los medios de comunicación han invadido todos los espacios y todas las conversaciones, introduciéndose también en la intimidad del hogar; en una sociedad con las características esbozadas en estas líneas, se ha visto gravemente afectado el núcleo familiar hasta el punto que mantener un compromiso religioso y transmitir la fe, teniendo como primer escenario la familia, se ha convertido en una tarea de 'titanes'.

Al respecto, sabiamente nos ilumina el Documento de Aparecida en su numeral 39 cuando se refiere a la realidad que nos interpela como discípulos y misioneros.

EL SENTIDO DE LA EUCARISTÍA PARA LOS CREYENTES


Por JUAN ÁVILA ESTRADA

"He aquí que yo estaré con ustedes todos los días hasta el final de los tiempos..." Con estas palabras se despide Jesús de sus discípulos antes de partir al Padre. Seguramente en ese mismo instante no comprendieron los apóstoles la dimensión de las palabras del Señor. Es probable que entendieran lo que nosotros estamos acostumbrados a decir cuando nos vamos a separar de alguien: "Te llevaré en mi corazón". Esta presencia de Jesús se realiza de múltiples maneras: en la Sagrada Escritura, en la comunidad, en los sacramentos, pero de una manera excelente en la Eucaristía. Esta presencia sacramental, oculta a los sentidos, es lo que nos quiso dar a entender Jesús cuando se denominó a sí mismo como "el pan vivo bajado del cielo". Hoy, por amor a nosotros, se ha querido quedar escondido en las especies sacramentales para poder transformarnos en Él.

Si bien cuando consumimos los alimentos, estos se transforman en nosotros, con la Eucaristía pasa lo contrario: nosotros somos transformados en ella, para ser todo en Cristo como Él lo es todo en el Padre. En la Eucaristía nosotros no tomamos a Jesús, sino que, por el contrario es Él quien nos toma a nosotros; eso hace parte del ministerio de su infinito amor.

CANTO LITÚRGICO EN EL TIEMPO ORDINARIO


En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo, Señor nuestro. Quien, por su misterio pascual, realizó la obra maravillosa de llamarnos del pecado y de la muerte al honor de ser estirpe elegida, sacerdocio real, nación consagrada, pueblo de su propiedad, para que, trasladados de las tinieblas a tu luz admirable, proclamemos ante el mundo tus maravillas.

La sección del año litúrgico denominada "Tiempo Ordinario" comprende treinta y tres o treinta y cuatro domingos. La primera parte de este periodo se encuentra antes de la Cuaresma y la segunda parte, que hemos iniciado ya, se ubica después de la Pascua, especialmente después de la solemnidad de Pentecostés.

La palabra 'Ordinario' no debe entenderse como algo común o de poca estimación. Todo lo contrario, el término hace referencia a algo que se sucede habitualmente y que se destaca de manera particular; por lo anterior no se debe pensar que el Tiempo Ordinario es menos importante que los otros tiempos litúrgicos.

LA FAMILIA CRISTIANA HA DE SER UNA AUTÉNTICA COMUNIDAD


Por RAFAEL AHUMADA P.

Juan Pablo II subraya que "la primera tarea de la familia es aquella de comprometerse constantemente en hacer de sí misma una auténtica comunidad de personas, viviendo fielmente su realidad de comunión entre sus diversos miembros: esposos, padres, hijos y parientes" (Familiaris Consortio, 18)

Esto quiere decir que cada persona, llamada a integrarse a la sociedad y a la Iglesia, debe primero adquirir en el seno de su propia familia plena conciencia de su ser comunitario, mediante su capacidad de relación con los miembros de su familia. En efecto, tal convivencia desarrollada en un clima de fraternidad, solidaridad y de respeto, ayudará a los miembros de la familia a asumir la responsabilidad recíproca en la gran familia a asumir los valores del Reino presentes en el mundo y a rechazar los antivalores. Por ello, podemos afirmar que la familia es comunidad de amor, comunidad de amor, comunidad educativa y formadora del hombre social.

LA FAMILIA ES COMUNIDAD DE AMOR
"Sin el amor la familia no puede vivir, crecer y perfeccionarse como comunidad de personas" (Familiaris Consortio, 18).

El amor cristiano se convierte entonces en característica fundamental de la familia como comunidad cristiana. La experiencia del amor determinará el modo de relacionarse de las personas en el hogar, manifestado en la mutua donación de los esposos, en el sacrificio de los padres por los hijos, en el afecto y respeto sincero de los hijos por los padres, abuelos y otros parientes.

AL LADO DE LOS MÁS DÉBILES


Cuando el presidente Carlos Lleras Restrepo logró la aprobación de la Ley 1 de 1968 sobre Reforma Agraria, lo hizo convencido de que "si no hacemos la reforma agraria nos lleva el diablo". Lo mismo había pensado la Conferencia Episcopal desde diez años antes.

En la pastoral de cuaresma de 1958, los obispos defendieron la expropiación de terrenos cuando el dueño no los cultiva o sólo los usa para criar ganados. En ese caso, escribían: "falta gravemente a la justicia social" y el gobierno debe "expropiar esos terrenos y parcelarlos para beneficio común". Es de desear, agregaban, "que al alcance de todos esté el poseer una tierra que puedan cultivar por sí mismos". "La reforma agraria es hoy una de las necesidades más apremiantes que presenta nuestro país", reiteraron en septiembre de 1960, cuando le dedicaron al tema una densa y extensa declaración. Para la Conferencia Episcopal era claro que el campesino sin tierras carecía de oportunidades de educación y de acceso a la escala social; y que se lo mantenía "sin recursos de producción y sin posibilidades de conseguir el mínimo de condiciones que exige una vida humana digna".

LA RECONCILIACIÓN, TEMA IMPORTANTE EN EL CENTENARIO DE LA CONFERENCIA EPISCOPAL


En el marco de la celebración del centenario de la Conferencia Episcopal Colombiana, se realizará el 'IV Congreso Nacional de Reconciliación', espacio de comunión convocado para la reflexión, análisis y puesta en común de experiencias y propuestas que, en torno a la justicia y la promoción de los derechos humanos, permitan alcanzar la paz de Colombia.

Durante este evento se reunirán por tres días, para reflexionar y analizar el mejor camino que permita consolidar la anhelada paz de Colombia, obispos, sacerdotes, directores de Pastoral Social y agentes de Pastoral Social de la Iglesia Católica en general, acompañados por funcionarios del gobierno nacional, empresarios, universitarios, miembros de otras iglesias y el cuerpo diplomático.

El Congreso de Reconciliación nació en el contexto del Vía Crucis Nacional del año 2000, con el fin de recoger las experiencias de paz y los temas de justicia desde los procesos de base de las jurisdicciones eclesiásticas del país. "No se consideran encuentros, sino un espacio de reunión de las experiencias nacionales y locales que, en torno a un tema específico, reflexionan, debaten y asumen compromisos, afirmó a Kairós monseñor Héctor Fabio Henao, Director Nacional de Pastoral Social.

PARROQUIAS: AYER Y HOY DE LA FE


UNIDAD PASTORAL MARÍA AUXILIADORA
COMUNIDAD QUE VIVE DE LA EUCARISTÍA

Por JULIO GIRALDO *

Hace aproximadamente 48 años el Instituto de Crédito Territorial comenzó la urbanización de unos extensos lotes situados al sur occidente de Barranquilla. Para la época, el sector era despoblado con muy pocas viviendas, calles llenas de barro y sin servicios públicos. Las familias fueron llegando atraídas por los subsidios y ayudas que brindaba el Inscredial y, poco a poco, el barrio que empezaron a llamar 'La Magdalena' se fue poblando y la calidad de vida fue mejorando. Sus moradores se organizaron, conformaron sus respectivas juntas y el barrio comenzó su proceso de crecimiento y progreso.

Es ya, entonces, una comunidad que requiere de inspección de policía, centro médico, parroquia y vías pavimentadas. Como en toda naciente comunidad algunos vecinos también se organizan y crean el ambiente y la necesidad de un acompañamiento espiritual por parte de la Iglesia Católica; acompañamiento que ya lo estaba ejerciendo el padre Gerardo Cardona Jaramillo, quien visitaba frecuentemente el barrio y fue él quien abonó y sembró la primera semilla. Lo anterior hace que monseñor Germán Villa Gaviria, Obispo de Barranquilla en ese entonces, piense en organizar en el sector una nueva comunidad para Dios, y crea el 3 de marzo de 1965 la Vicaría Parroquial de María Auxiliadora, poniéndola al cuidado del Padre Alejandro Beamonte Berges quien realiza un gran trabajo pastoral con la ayuda de los alumnos del Biffi y los integrantes del Movimiento Cursillos de Cristiandad.

EL ADOLESCENTE: ¿QUÉ HAY DETRÁS DE SU CRISIS?


Muchos de nosotros al reflexionar sobre la etapa de la adolescencia, sea porque recordamos vivencias propias o porque tenemos las de conocidos, familiares o amigos, pensamos en un periodo de despreocupación, de euforia, de disfrute absoluto. Pero detrás de esa máscara se ocultan muchos deseos, necesidades, temores y tensiones, que se viven y experimentan en la mayoría de los casos en secreto, casi en soledad física y afectiva.

Stanley Hall, en 1904, cuando publica un tratado sobre la adolescencia, se refiere a ésta como una edad especialmente dramática y tormentosa en la que se producen muchas tensiones, con inestabilidad, entusiasmo y pasión que dividen al joven entre tendencias opuestas. De acuerdo con la concepción de la teoría psicoanalítica, el equilibrio psíquico del adolescente se modifica como consecuencia del desarrollo y los cambios presentados en la pubertad; varían, además, los lazos con la familia de origen, pudiendo presentarse una desvinculación con ésta, y conductas de oposición a las normas, generando nuevas relaciones sociales, por lo cual cobra importancia la construcción de una identidad y la crisis de identidad asociada con ella (cf. Erikson, 1971).

EL RINCON DE PABLITO


¿Sabías que la Infancia Misionera en nuestra Arquidiócesis de Barranquilla ha organizado una jornada para que todos los niños y las niñas misioneros del Atlántico vivan un espacio de alegría y refléxión?

Pues así es. Todos los que participaremos de Infancia Misionera en las parroquias podemos asistir al Colegio Seminario Menor San Luis Beltrán el 15 de junio desde las 8:00 de la mañana hasta las 5:00 de la tarde y disfrutar de una jornada preparada especialmente para nosotros.

Participaremos en la Eucaristía, haremos alabanzas, tendremos dinámicas, juegos y actos culturales; también rezaremos el Santo Rosario, aprenderemos mucho en los talleres que se organizarán y disfrutaremos deliciosas comidas y postres en el festival gastronómico.

Dile a tus padres que te lleven a la parroquia y pregunten por el comité infantil, y así recibirás más información sobre esta interesante actividad. Si quieres más información llama al 3793316 o al celular 314 5214689, en estos teléfonos Paola Vergara te atenderá y resolverá todas tus inquietudes.

GUILLO EL MONAGUILLO

"Por Cristo, con Él y en Él,
a Ti, Dios Pare omnipotente
en la unidad del Espíritu Santo,
todo honor y toda gloria
por los siglos de los siglos"

Queridos amiguitos, de verdad la Liturgia tiene unos nombres algo difíciles, pero todos con un gran significado. Luego de las "intercesiones" que vimos en las ediciones anteriores de Kairós, continúa la doxología. Miren, 'doxología' significa alabanza, bendición, gloria.

En este momento el sacerdote toma y eleva un poco la hostia y el vino, que ya son Cuerpo y Sangre de Cristo, para glorificar a Dios por tan grande regalo. Con la doxología termina la Plegaria Eucarística.